La Major League Baseball anunció que a partir del 21 junio cualquier pitcher que aplique sustancias extrañas a las pelotas, será suspendido 10 juegos y los reincidentes serán sancionados de forma progresiva.
MLB suspenderá 10 juegos a pitchers que apliquen sustancias extrañas a las pelotas
Ahora los réferis podrán revisar por iniciativa propia a los lanzadores para detectar a posibles infractores.
En un comunicado, las Ligas Mayores reconocieron que no se habían hecho cumplir a cabalidad las reglas oficiales 3.01 y 6.02, las cuales prohíben la aplicación de sustancias extrañas a las pelotas de béisbol, ahora con un nuevo método para detectar a los infractores.
El principal cambio consiste en que ahora los árbitros no necesitarán reclamos por parte de los maganers y podrán revisar por iniciativa propia.
"Cualquier lanzador que posea o aplique sustancias extrañas en violación de las Reglas de Juego será expulsado del juego y será automáticamente suspendido de acuerdo con las reglas y el precedente pasado. Las suspensiones bajo la Regla 3.01 son 10 juegos. Los infractores reincidentes estarán sujetos a una disciplina progresiva. Los clubes y el personal del club también estarán sujetos a medidas disciplinarias por no garantizar el cumplimiento de estas reglas", se lee en el comunicado emitido por la MLB.
El Comisionado de Béisbol Robert D. Manfred, Jr dijo que la medida obedece a que cada vez se están usando sustancias más pegajosas.
"Después de un extenso proceso de advertencias repetidas sin efecto, de recopilar información de jugadores actuales y anteriores y de otros jugadores en todo el deporte, dos meses de recopilación de datos exhaustiva, escuchar a nuestros fanáticos y reflexionar cuidadosamente, he determinado que se necesita una nueva aplicación de sustancias extrañaspara nivelar el campo de juego ”, dijo .
“Entiendo que hay un historial de uso de sustancias extrañas en la pelota, pero lo que estamos viendo hoy es objetivamente muy diferente, con sustancias mucho más pegajosas que se usan con más frecuencia que nunca. Ha quedado claro que el uso de sustancias extrañas en general se ha transformado de intentar agarrar mejor la pelota a otra cosa: una ventaja competitiva injusta que está creando falta de acción y un campo de juego desigual. No se trata de un jugador o club individual, o de echar la culpa, se trata de un cambio colectivo que ha cambiado el juego y debe abordarse. Tenemos una responsabilidad con nuestra afición y el talento generacional que compite en el campo para eliminar estas sustancias y mejorar el juego".