Por tercera vez desde que fuese inaugurado en 1990, el E stadio de Béisbol Monterrey será la sede de partidos oficiales de las Grandes Ligas, aunque en un principio no se tenía planeado volver a jugar ahí.
Monterrey albergará una vez más a la MLB, aunque no era la primera opción
Retrasos en la construcción del nuevo estadio de los Diablos Rojos obligó a que la serie entre Dodgers y Padres se juegue en el Estadio de Béisbol Monterrey.
Y es que la idea era que el nuevo inmueble de los Diablos Rojos del México, que se llamará Estadio Alfredo Harp Helú, se estrenara a principios de este año y albergara la serie entre San Diego Padres y Los Angeles Dodgers.
Sin embargo, el sismo del pasado 19 de septiembre causó daños a la estructura donde se colocará el techo, por lo que la construcción se retrasó y obligó a posponer la inauguración hasta el 2019.
Eso le abrió la oportunidad al Estadio de Béisbol Monterrey, un escenario perfecto e idóneo para recibir una vez más a las Grandes Ligas, tal y como lo hizo en 1996 (Padres y Mets jugaron el primer partido oficial fuera de Estados Unidos y Canadá) y en 1999 (Día Inaugural entre Padres y Rockies).
La euforia que se vive en el norte del país por el “Rey de los Deportes” es incomparable, y para muestra, los boletos para los tres encuentros se agotaron en cuestión de horas.
Para estar al nivel del mejor beisbol del mundo, la casa de los Sultanes sufrió varias remodelaciones.
Iluminación led de primer nivel, nuevo césped artificial, una pantalla gigante adicional a la ya existente, renovación de todas las butacas y nuevas taquillas, entre otras cosas, son las mejoras que se encuentran en el recinto.
La Ciudad de México tendrá que esperar al menos un año más para recibir un partido oficial de la MLB, pero el destino tiene de nueva cuenta a Monterrey en los ojos del mundo, una oportunidad más para reafirmar que el beisbol en nuestro país se vive y se disfruta mejor en la Sultana del Norte.