Mundial Rusia 2018

    Giroud, el delantero francés que jugó todos lo partidos del Mundial sin rematar a puerta

    El ‘9’ de Francia contó con el respaldó del técnico Didier Deschamps en todo el torneo.


    Por:
    TUDN

    France's forward Olivier Giroud celebrates the team's victory in the Russia 2018 World Cup semi-final football match between France and Belgium at the Saint Petersburg Stadium in Saint Petersburg on July 10, 2018. (Photo by Paul ELLIS / AFP) / RESTRICTED TO EDITORIAL USE - NO MOBILE PUSH ALERTS/DOWNLOADS (Photo credit should read PAUL ELLIS/AFP/Getty Images)

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    France's forward Olivier Giroud celebrates the team's victory in the Russia 2018 World Cup semi-final football match between France and Belgium at the Saint Petersburg Stadium in Saint Petersburg on July 10, 2018. (Photo by Paul ELLIS / AFP) / RESTRICTED TO EDITORIAL USE - NO MOBILE PUSH ALERTS/DOWNLOADS (Photo credit should read PAUL ELLIS/AFP/Getty Images)

    El delantero Olivier Giroud gozó de la confianza del entrenador Didier Deschamps en todos los partidos que disputó la selección de Francia en Rusia 2018. Siempre vio acción pero curiosamente se tituló campeón del mundo sin anotar un solo gol ni patear a puerta en la competición.

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    El esquema táctico del seleccionador francés inició el torneo con un sistema táctico que comprendía un 4-3-3 en la victoria 2-1 ante Australia, en el que no figuraba un ‘9’ en la alineación titular. Giroud ingresaría en el minuto 70, en lugar de Antoine Griezmann.

    En la segunda presentación, triunfo 1-0 frente a Perú. Los galos presentaron un cambio de sistema en el que Deschamps proponía un 4-2-3-1 y que mantendría hasta la final, teniendo a Giroud como único atacante.


    En el empate sin goles con Dinamarca, el delantero volvió a ser titular y jugó los noventa minutos. Finalizaba la fase de grupos y no había goles de Giroud, ni disparos a puerta.

    Ya en los octavos, en la victoria 4-3 ante Argentina disputó los 90 minutos, recibió una amarilla y se mantuvo en cancha hasta el final.

    Por los cuartos de final, el combinado francés se media a Uruguay, otro rival sudamericano a la superó 2-0 y avanzó a semis con la formula Deschamps, mismo dibujo táctico y el delantero del Chelsea jugando titular y completo.

    Algunos incrédulos en la cancha, en grupos diferentes, celebraron emocionados.
    Así fue la fiesta de festejo de Francia como campeón del Mundial de Rusia 2018, con el trofeo en sus manos por segunda vez en la historia.
    La euforia se apoderó de los jugadores de Francia luego de que se señaló el final que al tiempo definía al nuevo campeón del Mundial de Rusia 2018.
    Kylian Mbappe, nombrado el Mejor Jugador Joven del Mundial, se arrodilló en el terreno.
    Los suplentes entraron a cancha de inmediato para unirse a la fiesta.
    Las reacciones de ambos bandos fueron espontáneas en un choque inevitable del ganador y el perdedor.
    Esa alegría contrastó con la frustración de Croacia, que a pesar de su entrega se quedó subcampeón.
    La consolación entre los propios jugadores fue frecuente como reconocimiento de la entrega.
    Las cámaras entraron también para vivir en primer plano esa felicidad francesa.
    Algunos croatas, mientras tanto, entraron en la tristeza e incluso en lágrimas.
    Los franceses fueron a celebrar a las tribunas con su público, en medio del colorido de las banderas.
    Los croatas, derrotados, también fueron a agradecer a su gente por todo el apoyo.
    Con la bandera al hombro, así como algunos se pusieron encima suyo al equipo, muchos franceses entraron en calor.
    Los abrazos entre todos los integrantes del equipo fueron la constante.
    En lo más alto, el ídolo: Didier Deschamps se convierte en el francés más grande en el fútbol de ese país al ser campeón como jugador y técnico.
    La lluvia se apoderó de la ceremonia de entrega del trofeo y medallas, donde el presidente francés levantó los brazos como campeón.
    El gran momento llegó con el trofeo en las manos del capitán Hugo Lloris.
    El trofeo fue mimado por todos los jugadores mientras la lluvia de gloria caía sobre ellos.
    Algunos pasearon con el trofeo por el mismo terreno que los vio brillar.
    Con sus medallas, los grandes cracks de Francia celebraron alardeando con sus medallas de campeones.
    Así fue la fiesta y el festejo de Francia como campeón del Mundial de Rusia 2018, el segundo en su palmarés.

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    Algunos incrédulos en la cancha, en grupos diferentes, celebraron emocionados.

    Frente a Bélgica, ya en semifinales, Francia contaría con Olivier Giroud desde el primer minuto de partido daría una asistencia de gol y recibirá la segunda amarilla en el torneo. Jugó hasta el minuto 85, cuando le cedió su lugar a Steven Nzonzi.

    Con la victoria 1-0 sobre los belgas, los franceses inscribían su nombre en la gran final.

    En el partido que le dio la segunda estrella de campeón del mundo a Francia, en el que vencieron 4-2 a Croacia, Deschamps se mantuvo fiel a su sistema y a Giroud como delantero.

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    El atacante alzó el trofeo que quedará en la historia con una extraña estadística: no marcó gol y ninguno de sus remates fue entre los tres palos.

    La estadística no impidió que Olivier Giroud, de 31 años, festejara con euforia el título logrado en el Mundial de Rusia 2018.

    Sin duda ha sido uno de los momentos más comentados de la final del Mundial. Los jugadores de Croacia desfilaban por el escenario montado en el centro del campo para recibir las medallas que los distinguen como subcampeones de la Copa del Mundo y una copiosa lluvia comenzó a caer en el estadio Luzhniki de Moscú.
    Mientras el presidente ruso fue rápidamente protegido por un paraguas para no mojarse, sus homólogos de Francia y Croacia y el resto de la comitiva se empapaban mientras saludaban a los jugadores. Tuvieron que pasar varios minutos para que llegaran a proteger Emmanuel Macron y a Kolinda Grabar-Kitarovic.
    Sin embargo, la presidenta croata no parecía muy preocupada por mojarse y se acercó a sus colegas aunque eso significara salir de la protección del paraguas que le habían puesto.
    Probablemente esta escena no la aprueba ningún experto en protocolo, pero la imagen del presidente francés Emmanuel Macron celebrando eufórico la victoria de Francia ante la mirada de Vladimir Putin y del presidente de la FIFA, Gianni Infantino, será una recordada por muchos fanáticos.
    La presidenta croata también siguió de cerca los festejos de Macron. En la imagen, lo mira mientras celebra el último gol de la escuadra francesa.
    Precisamente Grabar-Kitarovic protagonizó una de las escenas más emotivas de la final al abrazar efusivamente a los jugadores de la selección croata. En la imagen, la presidenta consuela al capitán Luka Modric.
    La mandataria, que se convirtió en una de las sensaciones de Rusia 2018 tras conocerse que viajó con sus propios recursos y con días libres que pidió sin goce de sueldo para apoyar a su selección, también abrazó cariñosamente a los jugadores de la escuadra francesa para felicitarlos.
    A los 52 minutos del juego, el partido fue interrumpido por cuatro personas con trajes que simulaban uniformes policiales antiguos que invadieron el campo y fueron derribadas por personal de seguridad. El grupo de activistas y música punk ruso Pussy Riot se atribuyó la responsabilidad por la invasión de cancha.
    En su cuenta de Twitter, dijeron que la invasión del campo fue una protesta para exigir al gobierno ruso la liberación de los presos políticos, que ponga fin a los “arrestos ilegales durante las protestas” y permita la competencia política en el país. En la imagen, una de las manifestantes saluda al francés Kylian Mbappé.
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    Esta es otra de las imágenes de la final del Mundial. El croata Luka Modric posa (apesadumbrado tras perder la final) con el Balón de Oro que le reconoce como el jugador más valioso del Mundial, mientras que el francés Kylian Mbappé, de solo 19 años, sostiene el título al mejor jugador joven. Los dos futbolistas dicen mucho de lo que representan sus selecciones. En el caso de Modric, tuvo que abandonar su pueblo natal de niño cuando asesinaron a su abuelo en medio de la guerra de los balcanes y fue descubierto en un campo de refugiados.
    La infancia de varios jugadores croatas estuvo marcado por ese conflicto y su llegada a la final del Mundial ha sido vista como un símbolo de la superación a través del deporte.
    Por su parte, Mbappe (en esta imagen junto con Antoine Griezmann - de madre portuguesa- y Paul Pogba - de padres guineanos-) es uno de los 14 de los jugadores de origen africano de la selección francesa.
    Como Mbappé, muchos de los jugadores de la vigente campeona del mundo comenzaron su carrera futbolística en la 'banlieu', como se conoce a los suburbios marginales de París, por lo que la victoria en Rusia es vista también como un triunfo de la multiculturalidad y los aportes de los migrantes a Francia.

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    Imagen Catherine Ivill/Getty Image
    Sin duda ha sido uno de los momentos más comentados de la final del Mundial. Los jugadores de Croacia desfilaban por el escenario montado en el centro del campo para recibir las medallas que los distinguen como subcampeones de la Copa del Mundo y una copiosa lluvia comenzó a caer en el estadio Luzhniki de Moscú.
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