PORTLAND, Estados Unidos, Feb. 20, 2016.- Damian Lillard disputó el mejor partido de su vida contra el equipo de su ciudad.
Blazers sorprenden y aplastan a Warriors
Damian Lillard brilla con 51 puntos y Portland apabulla 137-105 a Golden State
Lillard brilló con 51 puntos -- la mayor anotación de su carrera--, siete asistencias, seis robos y ninguna pérdida de balón para liderar a unos Portland Trail Blazers que dieron la campanada al apabullar este viernes 137-105 a los Golden State Warriors.
"Es una gran sensación", dijo Lillard, que es natural de Oakland, en California. "Especialmente contra el mejor equipo de la liga. No anotaba 50 puntos desde noveno grado".
El entrenador de Golden State, Steve Kerr, tuvo el mejor elogio para el encuentro del base.
"Estuvo fenomenal", dijo Kerr. "Parecía Steph Curry ahí fuera".
Curry, el Jugador Más Valioso de la pasada campaña, lideró a los Warriors con 31 tantos y cinco asistencias. Draymond Green añadió 14 puntos, 12 rebotes y ocho asistencias, pero perdió nueve balones. El brasileño Leandro Barbosa totalizó cinco unidades, un rebote y una asistencia.
Golden State vio concluida su racha de 11 victorias seguidas y vio como su intento para lograr el mejor registro en temporada regular de la historia de la NBA sufrió un importante revés.
"Esto es la NBA, así que va a haber noches en las que el otro equipo se caliente", explicó Kerr. "Estoy bien con que el otro equipo lance a canasta. Con lo que no estoy bien es con que perdamos el equilibrio en el tercer cuarto".
Los 137 puntos de los Blazers fueron la máxima anotación de un rival de Golden State esta temporada. Los 32 tantos de diferencia reflejan la derrota más abultada de los Warriors.
"No estábamos tan centrados como deberíamos", dijo Klay Thompson, que sumó 23 puntos para Golden State.
"Perdimos la compostura a la hora de controlar nuestras posesiones. Esto no suele suceder", reconoció Curry.
C.J. McCollum sumó 21 unidades y siete asistencias por los Blazers, que han ganado cuatro duelos al hilo y nueve de los últimos 10, para colocarse encima de la marca de .500, algo que no conseguían desde el 4 de noviembre, cuando se ubicaron en 3-2.
Los Blazers impusieron una férrea defensa a lo largo del encuentro, pero sobre todo en el tercer cuarto, cuando obligaron a que los campeones defensores de la NBA regalaran 13 balones. Portland ganaba por 104-79 después de tres periodos, y la diferencia pudo haber sido más abultada si los Blazers hubieran convertido en puntos más de esos balones que los Warriors perdieron.