Bogdanovic lidera remontada de Pacers sobre los Cavs y se ponen arriba en la serie

Bojan Bogdanovic anotó 30 puntos al encabezar la remontada de Indiana Pacers, que perdían por 17 al medio tiempo pero superaron 92-90 a Cleveland Cavaliers para tomar una ventaja de 2-1 en su serie de primera ronda de los playoffs de la NBA.

Cleveland registró una marca de 39-0 en la temporada regular en partidos que iba ganando después de tres periodos, y mantuvo ese record perfecto intacto al alzarse con la victoria en el segundo juego de la serie.

La increíble recuperación en la segunda mitad sucedió exactamente un año después de que Indiana arruinó una ventaja de 26 puntos al medio tiempo en un histórico colapso en playoffs ante los Cavs.

Esta vez, los Pacers propinaron un golpe devastador a los tricampeones defensores de la Conferencia del Este en una noche en que LeBron Jones se unió a Michael Jordan como los únicos jugadores en la historia de los playoff en tener a 100 doble dobles. James terminó con 28 puntos y 12 rebotes, pero no fue suficiente para impedir que Cleveland perdiera por primera vez en la campaña después de llegar al cuarto periodo con el marcador a su favor.

Y la razón principal del derrumbe fue Bogdanovic.

Después de una remontada que empató el marcador, el croata completó una jugada de cuatro puntos que finalmente puso a los Pacers arriba 81-77 a 6:10 minutos del final. Bogdanovic amplió la ventaja a siete unidades con otro triple desde el mismo lugar.

James respondió después con siete puntos consecutivos para empatar el juego.

Bogdanovic atacaría de nuevo con un enceste bajo el aro y otro triple antes que Thaddeus Young anotara para darle a los Pacers una ventaja de 91-84 con 53 segundos restantes.

James acertó un triple para acercar a los Cavaliers a cuatro, y Kevin Love encestó otro triple por Cleveland con siete segundos por jugar y colocar el marcador 91-90.

Darren Collison metió uno de dos tiros libres por los locales a cinco segundos del final, lo que dio a Cleveland una última oportunidad. Pero el largo tiro desesperado de J.R. Smith quedó corto.