El 26 de octubre de 1984, Michael Jordan, con 21 años de edad en ese entonces, hizo su debut en la NBA con los Chicago Bulls, equipo que se enfrentó a los Washington Bullets el día inaugural esa temporada.
Hoy hace 36 años debutó Michael Jordan, el jugador que cambió la NBA
El 26 de octubre de 1984, con 21 años, MJ debutó con los Chicago Bulls ante los Washington Bullets.
Después de quedar tercero en el draft, todos los ojos estaban puestos en Jordan, ya que lel estelar alero salido de la Universidad de North Carolina había llevado a su equipo universitario a ganar un título, y los fanáticos estaban ansiosos por verlo replicar lo mismo en la NBA.
No fue el debut más electrizante, pero fue los suficiente bueno para ayudar a los Bulls, una franquicia que por entones no había ganado ningún título, a comenzar la temporada con una victoria tras superar a los Bullets, 109-93, lo cual fue el comienzo de una histórica campaña de en el año de novato para Jordan.
Jordan jugó 40 minutos, anotó solo 16 puntos y, probablemente algo agobiado por la presión del día de su debut, solo acertó 5 de sus 16 tiros de campo. Sin embargo, se veía prometedor en todos los demás frentes además de anotar. Logró 6 rebotes y 7 asistencias, pero las estadísticas más impresionantes fueron sus 2 robos y 4 bloqueos.
Jordan promedió 28,2 puntos, 6,5 rebotes, 5,9 asistencias y 2,4 robos por partido. Lideró al equipo en cada una de estas categorías, convirtiéndose así en el primer y único novato en la historia de la NBA en lograr esta hazaña.
Como era de esperar, ganó el premio al Novato del Año, superando a jugadores como Hakeem Olajuwon y Charles Barkley.
Los seguidores de los Bulls podrían sentir que su salvador había llegado y el tiempo les daría la razón. Después de casi décadas desde su fundación, la racha estéril de los Bulls llegaría a su fin y el equipo dominaría la década de los 90’s con seis títulos y volviéndose uno de los equipos deportivos más recordados de la historia.
Y Jordan, gracias a su talento, carisma y gen ganador y en extremo competitivo, cambió no solamente a los Bulls, sino a la NBA pues la popularidad del juego creció enormemente gracias a sus fantásticas gestas en la duela.
Aunque para muchos expertos Jordan es el mejor jugador de baloncesto de la historia, él nunca se ha considerado más destacado y así lo explicó en una entrevista reciente.
"Para empezar, no vas a poder decir nunca con certeza quién ha sido el mejor. Para mí son cosas de la prensa y las relaciones públicas, para generar hype. En golf, Tiger y Jacl Nicklaus nunca jugaron uno contra otro, ni en la misma pista, el mismo torneo, con el mismo material... Yo no jugué contra Wilt Chamberlain. Ni contra Jerry West. Es injusto decir ahora quién fue mejor que quién. Solo entre jugadores similares puedes juzgar el impacto que tienen, cuanto cambiaron el juego... Yo gané seis campeonatos, pero Bill Russell ganó once. ¿Eso hace que uno sea mejor que el otro? No. Jugábamos en épocas diferentes. El debate nunca es justo, nunca se mide de forma proporcional", concluyó.