Sus carreras en la NBA pueden ser muy cortas aún pero muchos de los jugadores que la mañana del viernes entrenaron juntos ya se enfrentaron en un partido en serio, pero abrieron un paréntesis porque unieron fuerzas para una misma causa: disputar el Rising Stars.
Las jóvenes promesas de la NBA se relajan en el entrenamiento
Los juveniles estadounidenses y los extranjeros se verán las caras pero disfrutan el ambiente All Star.
El NBA Rising Stars es un partido que se disputa entre los mejores novatos y jugadores de segundo año en la Liga en el que muestran lo mejor que tienen pero no en un ambiente competitivo, al menos durante los tres primeros cuartos del cotejo.
Zion Willimson (New Orleans Pelicans), Trae Young (Atlanta Hawks) y Ja Morant (Memphis Grizzlies), unirán fuerzas para contrarrestar el talento de jugadores como Luka Doncic (Dallas Mavericks), Rui Hachimura (Washington Wizards) o Nicolo Melli (Pelicans).
Primero entrenaron los jugadores internacionales, desplegando un mosaico cultural interesante, con jugadores de todoas las regiones del mundo pero conectados por un balón de basquetbol. Eso sí, tomando en serio las indicaciones del entrenador Adrian Griffin.
Doncic tuvo que dejar pronto la práctica para cumplir con sus compromisos comerciales y con entrevistas previamente pactadas, pero sus compañeros se soltaron en cancha, lanzaron a la canasta y corrieron jugadas para ponerse a tono y conocerse mejor.
Los mismo hicieron los jugadores estadounidenses, tratando de cohesionarse para jugar por la noche del viernes con una buena dosis de entendimiento, entre risas y retos, los jóvenes basquetbolistas trataron de seguirle el paso al coach Phil Handy con las indicaciones.
Al final, para entender mejor lo acontecido, los estadounidenses juveniles se lanzaron un reto entre todos de meter canastas de media cancha para cerrar la práctica. No fue una sorpresa que el único que logró encestar fue Trae Young, un aut´éntico francotirador que cuando metió su lanzamiento, la Wintrust Arena se encendió.
Eso es un anticipo de lo que se viene para el partido de la noche, con jóvenes hambrientos por mostrar lo que pueden hacer en una cancha de baloncesto.