Por: Jorge Pinzón Anaya
El legado innovador y controvertido de Buddy Ryan como coach en la NFL
Desde el diseño de una defensa poderosa hasta pleitos con Mike Ditka y Kevin Gilbride.
Buddy Ryan será recordado como un diseñador de esquemas defensivos notables que alcanzaron 2 títulos de Super Bowl. Pero también su explosivo carácter y personalidad provocadora fueron motivo de pleitos, no con sus rivales, sino con sus compañeros entrenadores, además de ordenar golpes no tan legales a jugadores específicos. Un legado lleno de controversia.
Jugó colegial entre 1952 y 55 en Oklahoma A&M University (hoy conocida como Oklahoma State. Fue sargento del Ejército de los Estados Unidos durante la Guerra de Corea. En 1957 trabajó por primera vez en su vida como entrenador, dirigió al Gainesville High School en Texas. Para 1961 recibió la oportunidad de ser coach de la línea defensiva en Buffalo Bills. Tras un breve paso por Pacific y Vanderbilt fue contratado en 1968 para ser coach de línea defensiva de New York Jets.
En 1968 fue parte de la magia de aquellos Jets del quarterback Joe Namath que sorprendieron con el campeonato en el Super Bowl III. Buddy Ryan diseñó el plan defensivo de los Jets con base en las debilidades del propio Namath, es decir, se inspiró en el daño que se podía hacer a un quarterback mediante cargas de los linebackers y profundos.
Para 1976 fue contratado por Minnesota Vikings del coach Bud Grant. La intención fue volver más agresiva la línea defensiva de aquella unidad conocida con el apodo “Purple People Eaters” con jugadores como Jim Marshall y Alan Page. Ese año los Vikings fueron al Super Bowl XI pero perdieron con Oakland Raiders.
A partir de 1978 se hace cargo de la coordinación defensiva de Chicago Bears. En ese momento los Bears tenían a Neill Armstrong como entrenador en jefe pero fue despedido en 1982. Muchos jugadores pedían que Buddy Ryan fuera el nuevo coach principal, sin embargo la organización contrató para el puesto a Mike Ditka, ex jugador de los Bears y que venía de ser asistente de Tom Landry en Dallas. Ryan se quedó en la coordinación defensiva con cierta independencia que Ditka cedió.
En 1985 llegó a su clímax el sistema defensivo 46 creado por Buddy Ryan. Chicago contaba con los jugadores idóneos para desarrollar un esquema agresivo y veloz. Cuatro linieros cazaquarterbacks: Dan Hampton, Steve McMichael , William Perry y Richard Dent; Tres linebackers flexibles con un líder natural llamado Mike Singletary en el centro, mientras Otis Wilson y Wilber Marshall atacaban por los extremos; y atrás 2 profundos sumados al apoyo de los linebackers y muchas veces con cargas especiales: Dave Duerson y Gary Fencik.
El 26 de enero de 1986 es una fecha especial para Chicago Bears. Concretaron una temporada fenomenal que estuvo a nada de ser perfecta. Los Bears perdieron solo un partido en todo el año (Miami en lunes por la noche donde se dice que tuvo un pleito al medio tiempo con el coach Ditka) pero eso quedó en el pasado tras la coronación en el Super Bowl XX donde vencieron por paliza 46 – 10 a New England Patriots. La defensa de Chicago se hizo llamar los “Monstruos del Midway”, para muchos, la mejor que se ha presentado en un Super Bowl. Buddy Ryan pasó a la historia como el único entrenador asistente, hasta ahora, que los jugadores levantan en hombros al final de un partido de campeonato.
El título en el Super Bowl XX fue la despedida de los Chicago Bears. En 1986 Buddy Ryan fue nombrado entrenador en jefe de Philadelphia Eagles. Estuvo 5 años donde no faltó la controversia. Muchas veces el coach fue acusado de ordenar golpes sucios a jugadores específicos, sobre todo de Dallas Cowboys. Ryan llegó a abandonar el campo de juego a toda velocidad antes que Jimmy Johnson, coach de Dallas, lo fuera a encontrar para reclamarle.
Tras un descanso de dos años regresó en 1993 como coordinador defensivo de Houston Oilers, equipo que era dirigido por Jack Pardee. Su paso por el equipo texano se recuerda por el incidente que tuvo con Kevin Gilbride el coordinador ofensivo. Durante un partido contra los Jets, el último de la temporada, Ryan explotó ante la ineficacia ofensiva, su forma de reclamarle a Gilbride fue lanzando un puñetazo que no llegó a su destino. Un hecho lamentable del cual Buddy Ryan solo dijo “espero que nadie se haya dado cuenta”.
El último trabajo que Buddy Ryan tuvo como entrenador en jefe en la NFL fue con Arizona Cardinals en 1994 y 1995, temporadas para el olvido que significaron su adiós. Su registro total fue de 55 triunfos, 55 derrotas y un empate. Nunca pudo ganar un partido de postemporada, a cambio perdió 3 veces. Por lo tanto, fue como entrenador asistente como alcanzó sus mayores logros.