Por: Jorge Pinzón Anaya
El momento que marcó a la franquicia: Los malosos Raiders de Oakland
Violencia defensiva, una carrera en reversa y un compromiso pendiente.
Si bien esta franquicia nació en 1960, apenas cuenta con 56 años de historia, su tradición, campeonatos y leyendas son equiparables a los máximos logros que cualquier otro equipo con más décadas de trayectoria.
Los Raiders tienen plena identificación con el lado oscuro, una mística definida con la maldad, el equipo rudo, agresivo, donde juegan los que nadie quiere en su equipo. Irónicamente sus frases motivacionales: (Commitment to Excellence) “Compromiso con la excelencia” y (Just win, Baby) “Solo gana, nene”, creadas por su fundador, entrenador, gerente y dueño, Al Davis, poco se refieren a esa imagen monstruosa que a los aficionados les encanta.
Esa actitud violenta muchas veces se vio reflejada en el terreno de juego, por eso en México durante la década de los años ochenta el cronista Fernando Von Rossum los bautizó como “Los malosos”. Apodo que se hizo tan popular y que trascendió en el tiempo que muchos aficionados creyeron que era el apelativo oficial del equipo, no eran los Raiders, eran los Malosos de Oakland.
GRANDES RECUERDOS
En Oakland o en Los Angeles, ciudades que han sido sede de los Raiders, la franquicia ha tenido muchos momentos grandes, clave y fundamentales en su historia. Seleccionar uno provocaría injusticia sobre otros. Momentos como estos:
· Nacieron en 1960 en la Liga Americana, circuito del que fueron campeones en 1967, con ello lograron el boleto para jugar el Super Bowl II, que al final perdieron con Green Bay Packers de Vince Lombardi.
· En 1969 contrataron a un coach leyenda, que incluso su nombre es familiar para las nuevas generaciones del Siglo XXI, sobre todo por el famoso video juego diseñado con las ideas de este talentoso entrenador en jefe: John Madden.
· En los Playoffs de 1974 frenaron a los bicampeones consecutivos Miami Dolphins durante el famoso partido Divisional que se definió a 24 segundos del final. El quarterback Ken Stabler, casi en el suelo, lanzó un pase que Clarence Davis atrapó entre tres defensivos. Oakland le dio la vuelta al marcador para ganar 28 – 26. El partido fue bautizado como “Sea of Hands” game. Luego los Raiders perderían con Pittsburgh el partido por el Campeonato de la Conferencia Americana.
· En 1977 los Raiders visitaron a Baltimore Colts en Playoffs Divisional para protagonizar el segundo partido de postemporada más largo en la historia. Durante el desarrollo del encuentro Ken Stabler lanzó un pase al ala cerrada Dave Casper quien hizo una de las recepciones memorables en la historia de este deporte. Casper atrapó el balón luego de levantar la cabeza y su vista directamente al cielo, de espalda a la trayectoria del balón. Momento que también recibió un apodo: “Ghost to the post”. Una semana después Oakland perdería con Denver el Campeonato de la Conferencia Americana.
MOMENTOS DE MALOSOS
Durante el Super Bowl XI contra Minnesota Vikings hubo dos momentos que reflejaron la mística agresiva de los Raiders. El profundo Jack Tatum conectó con sus antebrazos tremendo golpe a la cabeza del receptor Sammy White, cuyo casco salió volando afortunadamente sin la cabeza del jugador de los Vikings. Tatum tuvo otro momento de violencia extrema. Durante un partido de pretemporada en 1978 golpeó al receptor Darryl Stingley de New England Patriots quien quedó paralizado el resto de su vida.
El otro momento glorioso en el Super Bowl XI fue la intercepción de Willie Brown a pase de Fran Tarkenton. Brown la regresó para touchdown. La imagen que capturó NFL Films es majestuosa al observar la carrera de Brown como si fuera directo a la cámara que se cerraba al rostro del jugador, un efecto demoledor.
MOMENTO EN REVERSA
El momento clave de los Raiders a la ofensiva se produjo durante el Super Bowl XVIII, cuando el equipo tenía su sede en Los Angeles y jugó contra Washington Redskins por el título. El equipo que entonces era entrenado por Tom Flores, venció por paliza de 38 – 9, tercer campeonato de Super Bowl, hasta ahora el último.
Jugada clave fue una carrera improvisada de Marcus Allen quien buscó el hueco por el lado izquierdo de la línea, le cerraron el paso, cambió el camino mediante vuelta entera para dirigirse al lado derecho, pero cortó por el centro, aceleró dejando atrás a la defensiva de Washington para jugada e 74 yardas y un touchdown que electriza cada vez que se recuerda.
REGRESO AL COMPROMISO
Desafortunadamente para los Raiders, después de esa victoria en el Super Bowl XVIII sus apariciones en Playoffs ya no fueron tan frecuentes, 8 veces en 32 años. Una franquicia que podía presumir ser la única con participación en el Super Bowl en 3 décadas diferentes: Sesenta, setenta y ochenta, pudo regresar hasta el Siglo XXI en 2002 pero fue apaleado en la edición XXXVII por Tampa Bay Buccaneers. Partido que hasta hoy ha sido el último de postemporada que han jugado, 13 años de ausencia, quieren regresar al compromiso con la excelencia y por fin volver a ganar, nene.