Perder a sus dos primeros quarterbacks justo antes de los Playoffs y, con ello, la obligación de poner la responsabilidad a un novato, quien tuvo su debut en la liga, le costó caro a los Oakland Raiders, que quedaron eliminados en la Ronda de Comodines, al perder 27-14 ante los Houston Texans.
El sueño de los Raiders se apaga con la revancha de los Texans
Oakland no pudo ser efectivo a la ofensiva con su tercer quaterback y cayó 27-14 ante Houston, que avanza a la Ronda Divisional
Brock Osweiler jugó un partido sin errores en los controles de los Texans, que también se cobraron la revancha del juego de la Semana 11, celebrado el 21 de noviembre en el Estadio Azteca de la Ciudad de México, cuando los Raiders se impusieron 27-20.
En cambio, el novato Conor Cook se mostró errático en los envíos, con 18 de 45 envíos completos y 161 yardas, además de tres intercepciones, lo que limitó al aparato de receptores que brilló con Derek Carr durante la campaña regular. Aparte, Latavius Murray sólo produjo 39 yardas por tierra ante la eficaz defensa frontal de los Texans.
Los Raiders fueron competitivos en el primer medio, con desventaja de 10-7 al descanso, pero DeAndre Hopkins recibió un pase de dos yardas de Osweiler en las diagonales en el tercer cuarto, que ponía el marcador 20-7.
Más adelante, el propio QB de los Texans anotó en acarreo de 1 yarda para el 27-7 que prácticamente sentenció el partido.
Los Texans esperan conocer a su rival en la Ronda Divisional. Si Miami vence a Pittsburgh, serán los Kansas City Chiefs; en caso contrario, se medirán ante los New England Patriots.