LONDRES - Los New York Jets (3-1) necesitaron viajar al estadio Wembley para reencontrarse con la victoria 27-14 sobre su rival divisional los Miami Dolphins (1-3), en encuentro perteneciente a la cuarta semana de la temporada 2015 de NFL.
Jets 27-14 Dolphins: New York recobró la memoria en Londres y doblegó a Miami
Los New York Jets necesitaron viajar al estadio Wembley para reencontrarse con la victoria 27-14 sobre los Miami Dolphins
El legendario escenario recibió esta mañana al primero de tres juegos que tiene programados en la presente campaña, donde presenció el tercer descalabro consecutivo por parte de la escuadra comandada por el entrenador Joe Philbin.
En tanto que los Jets se recuperaron del revés que le propinó los Philadelphia Eagles la semana pasada, se dio el gustazo de vencer a un oponente directo en la División Este de la Conferencia Americana (AFC), aunque se llevó el disgusto de perder a tres elementos defensivos.
En el primer periodo, los neoyorquinos mantuvieron a raya a la ofensiva rival y apostaron por la explosividad de su corredor estelar Chris Ivory, quien tuvo algunos problemas con el cuádriceps pero los aires del “viejo continente” lo renovaron y acabó por ser uno de los mejores del partido.
Él mismo fue el responsable de inaugurar la pizarra en el mítico recinto londinense con acarreo de tres yardas, luego el veterano pateador N ick Folk se encargó de establecer el 7-0.
Mientras Miami no hacía otra cosa que despejar, loa Jets aprovecharon para ampliar la distancia a 10-0 con gol de campo “de rutina” para Folk, quien acertó en su ensayo de 22 yardas.
Para el segundo episodio, los de la Gran Manzana continuaron con la sana costumbre de pisar terreno enemigo, pero volvieron a conformarse con sólo tres puntos, cortesía de una senda patada de 48 yardas, la cual significó el 13-0.
A la serie siguiente, el ataque de los 'Delfines' por fin descifró el acertijo de la muralla blanquiverde y le puso número a su casillero, producto de la conexión de ocho yardas del mariscal Ryan Tannehill para el ala cerrada Jake Stoneburner.
Parecía que los cartones al medio tiempo permanecerían 13-7 en favor de Nueva York, pero con apenas 33 segundos en el cronómetro, el quarterback Ryan Fitzpatrick concretó alianza de 10 yardas hasta las diagonales con el receptor Eric Decker, cuya participación estaba en duda por una lesión en la rodilla.
De este modo, el margen de maniobra para el conjunto del entrenador en jefe Todd Bowles fue de 20-7 y, sin caer en alguna clase de confianza excesiva, a cinco minutos de haber iniciado el tercer capítulo, el corredor Zac Stacy logró carrera de dos yardas para aparecer en la zona prometida y colocar el 27-7.
Para el último cuarto, Tannehill se destapó con su segundo envío de touchdown al encontrar tras 10 yardas al receptor Kenny Stills, lo cual dio vida a los suyos, con 13 puntos de desventaja pero 10 minutos por jugar, se abría la puerta para soñar con la remontada.
Sin embargo, el propio mariscal cavó la tumba de los Dolphins, pues en los últimos cinco minutos de acción, se la jugó en cuarta oportunidad y el resultado fue el mismo en ambas ocasiones: intercepción, una del veterano esquinero Darrelle Revis y otra de Marcus Williams.
Si bien la victoria le vino de maravilla a los Jets, en el aspecto defensivo se encendieron las alarmas por los percances del apoyador David Harris y del profundo Calvin Pryor, ambos por aparente lesión en la rodilla, además del novato ala defensivo Leonard Williams (pierna), aunque la “buena nueva” es que la siguiente semana descansan.
Por los vencedores, Fitzpatrick completó 16 pases de los 19 que intentó, cosechó una ganancia de 218 yardas, consiguió un pase de anotación y sufrió una intercepción.
Mientras su homólogo Tannehill apenas hizo buenos 19 de sus 44 ensayos, sumó 198 yardas, lanzó dos veces a la “tierra prometida”, lo capturaron tres veces y le telegrafiaron dos disparos.
Anotación por cuartos:
Jets NY 10 10 07 00 -- 27
Miami 00 07 00 07 -- 14