¿Qué viene a corto plazo para Tom Brady dadas las circunstancias?

Tanto compañeros de equipo como rivales de profesión, entrenadores y directivos de la NFL, incluso los aficionados más recalcitrantes y detractores lo saben: Tom Brady no tiene nada más qué demostrar en el emparrillado.

Sin embargo, la voz del veterano quarterback de los New England Patriots podría ser contraria a esas ideas, o pensamientos. Pero es quizás ese amargo sabor de boca y la desilusión sobre cómo terminó la temporada de los Pats y cómo se desempeñó Brady en la segunda mitad de la temporada que pese a sus 43 años, estaría buscando volver en 2020 para disputar su temporada 21 en la NFL.

Un día después de la derrota en el juego de comodines en Foxboro ante los Tennessee Titans, el veterano pasador fue tajante cuando se le preguntó acerca del retiro: "yo diría que es poco probable, pero, sí, esperemos que no se dé", e incluso añadiría que no quería ahondar mucho acerca del futuro pero que se sentía orgulloso de su equipo por los esfuerzos de mejorar no solo este año, sino todos los demás también.

Robert Kraft, propietario de los Patriots, ha dicho que no quiere ver a Brady jugando en otro equipo, pero a partir de aquí surgen varias preguntas como ¿cuánto sería justo ofrecerle a un quarterback de 43 que mostró ya un franco declive este año? ¿Qué podrían esperar los Pats de un jugador que en la segunda parte de 2019 vino a menos? ¿Regresará a un buen nivel en el futuro pese a la edad? ¿Qué tipo de refuerzos podrían ayudar a mejorar a Brady y cuánto costaría hacer un equipo a su alrededor? Quizá haya más cuestionamientos pero estos son los primeros que salen a flote.

"Insisto, no sé qué es lo que va a pasar y no voy a predecirlo. Nadie necesita tomar decisiones a este punto. Me encanta jugar futbol, y jugarlo con este equipo. Me ha fascinado jugar para este equipo por dos décadas y ganar muchos juegos, pero repito, no sé lo que signifique cambiar de rumbo, así que lo tomaré día a día", agregó el ganador de seis títulos del Super Bowl.
Viéndolo fríamente, Brady no necesita del futbol para demostrar que es alguien o que tiene mucho por ganar. Sus seis anillos de Super Bowl, sus cuatro designaciones como MVP del SB, tres MVP de la NFL, cinco años después de que se retire tiene un lugar asegurado en Canton, Ohio, en el Salón de la Fama del Futbol Profesional en su primera votación. Y tampoco se trata de dinero, ya sea tanto por salario como por patrocinios, Brady es de los jugadores de la NFL más prolíficos en términos de dinero.

Quizás lo que necesita, como muchos otros deportistas de élite, es la competencia que le da sabor a su existencia, la adrenalina de los retos, el dulce sabor de los éxitos, la camaradería, el seguir aprendiendo de los errores, en entrenamiento, la convivencia, en fin, todo aquello que una vez que llega el retiro, no regresa.

Lo más duro es quizás para Brady saber que una vez que se acabe su carrera en el futbol profesional no habrá alguna otra actividad que la pueda remplazar, como le ha pasado a Peyton Manning, quien parece estar tomando muy bien su nuevo rol, como celebridad, luego de retirarse.

Mantengan la sintonía, con Brady, luego de sus palabras, algunas de ellas encriptadas de manera que no son legibles a primera instancia, todo puede suceder.