El magnate de los casinos Sheldon Adelson se retiró el lunes de un acuerdo para la construcción de un estadio techado de 1.900 millones de dólares en Las Vegas, donde jugarían los Raiders.El anuncio surge después de una propuesta del equipo para pagar 1 dólar anual por alquiler y para operar el estadio. El proyecto se queda por lo pronto sin uno de los responsables principales de dar respaldo financiero para mudar al equipo de Oakland a Las Vegas.Adelson desempeñó un papel protagónico en la iniciativa para atraer a los Raiders y para que Las Vegas tuviera un equipo de la NFL por primera vez. El plan creció eventualmente para involucrar el desembolso de 750 millones de dólares de los contribuyentes.El multimillonario y su familia habían prometido pagar 650 millones de dólares. Ahora, los Raiders tendrían que buscar ese dinero a partir de otras fuentes. Los Raiders han prometido desembolsar 500 millones de dólares.La oficina del gobernador de Nevada, Brian Sandoval, informó que el acuerdo de arrendamiento planteado la semana anterior contempla que los Raiders absorban 1.150 millones de dólares por el costo del estadio, asumiendo además la operación y los riesgos.Mediante un comunicado, los Raiders agradecieron la participación de Adelson en el proyecto durante el último año y prometieron cumplir la promesa hecha por el dueño del equipo Mark Davis, de mudarse a Las Vegas.La decisión de trasladar a los Raiders debe ser aprobada por los dueños de los demás equipos. El retiro de Adelson elimina la necesidad de pedir que los propietarios revoquen una regla, la cual prohíbe que los operadores de casinos posean participaciones en los equipos.Los dirigentes del equipo habían dicho que el banco Goldman Sachs se integraría al proyecto.Mediante la propuesta de arrendamiento, los Raiders operarían el estadio para 65.000 espectadores, que se construiría en un sitio por definir, probablemente cerca de la avenida principal de Las Vegas.En su escueto comunicado, Adelson, director general de Las Vegas Sands Corp., declaró que se le había excluido de las conversaciones que desembocaron la semana pasada en la propuesta de arrendamiento presentada a la autoridad del estadio en el condado de Clark."No sólo fuimos excluidos del acuerdo propuesto, ni siquiera estábamos al tanto de su existencia", se quejó Adelson.Sands posee los complejos turísticos Venetian y Palazzo, así como un centro de convenciones en Las Vegas y varios casinos en Macao. Ha respaldado causas del Partido Republicano, y su familia posee además el diario local, Las Vegas Review-Journal."Está claro que los Raiders han decidido que su camino para mudarse a Las Vegas no incluye a la familia Adelson", señaló el comunicado. "Así que, lamentablemente, no estaremos ya involucrados en faceta alguna de la discusión sobre el estadio".