Peleadores de UFC intentan frenar los disturbios en EEUU

Las protestas contra la brutalidad policial se propagaron durante el fin de semana tras el asesinato de George Floyd. El domingo por la noche, el campeón de peso semipesado de UFC, Jon Jones, asistía a una protesta en su ciudad natal Albuquerque, Nuevo México, cuando se encontró con algunas personas que estaban destrozando propiedades y les pidió que le entregaran sus latas de spray.

Dennis Rodman pide fin a los disturbios tras asesinato de George Floyd.

"¿Por qué demonios eres un adolescente punk destruyendo nuestras ciudades? Como joven negro, confía en mí, yo también estoy frustrado, pero este no es el camino, estamos empezando a empeorar la situación", comentó Jones en redes sociales.

Jones expresó sus sentimientos sobre la muerte de Floyd la semana pasada y pidió un cambio de política.

"Debe haber un cambio de política a nivel nacional", escribió Jones en un tweet. "Cuando un hombre está esposado y grita que no puede respirar. Quítate de encima de su pecho y cuello. Si no puedes hacer eso, probablemente no deberías llevar una placa de policía".

Al igual que Jones, el ex campeón de peso semipesado de UFC, Chuck Liddell, también intentó frenar el saqueo y la violencia durante las protestas recientemente. En Huntington Beach, California, se vio a Liddell tratando de calmar la tensión entre las personas y mantener pacíficas las protestas.