Después de una larga semana de expectativa, atención a medios y un sinnúmero de declaraciones, por fin llegó el día del juego más Importante del año, el Super Bowl LIII. Este domingo 3 de febrero de 2019 los New England Patriots y los Rams de Los Angeles juegan en el Mercedes-Benz Stadium de Atlanta para definir al nuevo campeón de la NFL.
La espera terminó: Patriots y Rams definirán al nuevo campeón en la NFL
La ciudad de Atlanta y su majestuoso Mercedes-Benz Stadium vivirá el juego más importante del año este domingo cuando New England y Los Angeles peleen por el Vince Lombardi.
Fueron días que se pasaron lento, de tratar con la prensa en conferencias, entrevistas, preguntas donde se asomó el gran respeto que sienten ambos equipos por el rival. No hubo provocaciones ni mucho menos burlas o hacer menos al contrario. Tanto Pats como Rams dieron una muestra de profesionalismo y no cesaron en enviar elogios para sus contrincantes del domingo.
La dinastía de los New England Patriots dejó claro a lo largo de la semana que a pesar de que han jugado varios Super Bowls en la última década, la experiencia no será factor si no la ejecución. Dijeron que su concentración está a tope y que están preparados para llevar a cabo el plan y conseguir otro campeonato. La franquicia busca su sexto título de la NFL para convertirse en la máxima ganadora de Super Bowls junto a la de Pittsburgh Steelers (6).
Los Angeles Rams vive un espectacular presente y un futuro promisorio con un equipo plagado de jóvenes, que esperan equilibrar la balanza de la franquicia en el Súper Tazón, ganando el segundo de su historia. Los Carneros han perdido dos veces el Gran Partido (1979 y 2001) y su único título ocurrió hace 19 años, durante el primer Super Bowl del nuevo milenio.
Toda la semana se recordó el antecedente del Super Bowl XXXVI en Nueva Orleans, cuando Rams y Patriots jugaron por primera vez por el Vince Lombardi, el cual ganó Nueva Inglaterra 20-17 con la famosa patada de Adam Vinatieri en los segundos finales.
Tom Brady se dio a conocer al mundo aquella noche del 3 de febrero del 2002, y ahora, exactamente 17 años después volverá a medirse a los Rams, otra vez bajo el mando de Bill Belichick. Ambos ganaron ese día su primer campeonato y hoy viviran su noveno Super Bowl, ya con cinco anillos en su propiedad y un dominio avasallador de la AFC jugando 13 finales de conferencia en ese lapso.
Los Rams tuvieron que sufrir demasiado para encontrar la fórmula ganadora. Desde entonces han cosechado 12 temporadas perdedoras y solo tres veces avanzaron a los Playoffs, sin avanzar más allá de la Ronda Divisional. La llegada del coach Sean McVay junto a la del quarterback Jared Goff, seleccionado número 1 en 2016, renovó los bríos de unos Rams que un año después dejaron St. Louis para regresar a la ciudad de Los Ángeles. Los Rams cambiaron su mentalidad y hoy parecen destinados a repetir la historia de la pareja de coach-quarterback enfrentan esta tarde.
New England tiene muchos jugadores con experiencia en el Super Bowl con 38 que han vivido este tipo de partidos de altísimo riesgo, mientras Los Angeles apenas cuenta con cuatro en un roster de 53. Aunque la diferencia en esta cifra es abismal, el juego está demasiado parejo pues la línea de apuestas no se movió y mantuvo a los Patriots favoritos (-2.5) y altas/bajas de 56.5 puntos.
Estrellas como Brady, Goff, Gronkowski, Aaron Donald, Sony Michel, Todd Gurley, Edelman, Cooks, Trey Flowers, Ndamukong Suh, etc. son garantía de que será un partido vibrante y con mucho espectáculo, no solo el que se espera con el show de medio tiempo de Maroon 5.
Una victoria de los Patriots acrecentaría el legado de la dinastía Brady-Belichick que ha marcado para siempre la historia de los Pats, mientras que un triunfo de los Rams daría pie a una nueva era y la posibilidad de ver el nacimiento de un equipo a vencer durante los próximos años. Todo esto lo sabremos hoy, pues nadie se quiere perder lo que pasa en el Super Bowl LIII de Atlanta, donde saldrá un nuevo campeón de la NFL.