La Final de la Conferencia Americana se celebrará este domingo 20 de enero de 2019 donde conoceremos al último invitado al Super Bowl LIII, el juego de campeonato que cierra la campaña. Los todopoderosos New England Patriots jugarán por decimosexta ocasión en su historia el partido por el título de la AFC, y octavo de forma consecutiva, ante la revelación del año: los Kansas City Chiefs, que no juegan un Super Bowl desde hace 49 años. Polos opuestos, por donde se les vea.
New England vs. Kansas City por la AFC: los fascinantes Chiefs ante los poderosos Patriots
El estelar duelo entre los Pats del legendario Tom Brady contra Patrick Mahomes y compañía en Kansas City, entregará el título de la AFC y al equipo que jugará el Super Bowl LIII.
Pero el choque entre Chiefs y Patriots será mucho más parejo de lo que esta realidad refleja, pues los pupilos de Andy Reid han demostrado en toda la campaña ser el equipo más fuerte y regular de la Americana, incluso por encima de los eternos Patriots, actuales bicampeones de la AFC.
Los Kansas City Chiefs (13-4), en contraste, alcanzaron apenas su quinto Juego de Campeonato de la AFC en todos los tiempos, donde tienen récord positivo de 3-1, con victorias sobre Oilers, Bills y Raiders y una derrota con Buffalo en 1994. 25 años de ausencia en el máximo juego que tiene la Conferencia Americana.
Los New England Patriots (12-5), en cambio, mantienen una supremacía espectacular en la Americana donde esta campaña lograron su décimo titulo consecutivo en la División Este, y están instalados en la Final de la Americana por octavo año en fila. Los Pats tienen récord de 10-5 en los Juegos de Campeonato, ganado 8 de los 12 más recientes desde 2001. Impresionante.
Relevante señalar que esas ocho veces han sido de la mano de Tom Brady bajo las órdenes del coach Bill Belichick. Casi dos décadas de dominar la AFC y en general la NFL, de ahí que se les llame la dinastía más grande de los deportes estadounidenses de todos los tiempos. Contra eso juegan los Chiefs. Contra la historia. Contra la lógica. Contra los siempre favoritos.
Sin embargo, a Kansas City no le regalaron nada. Se ganó el derecho a estar en esa fase y además hacerlo jugando como local en el imponente Arrowhead Stadium, el estadio más ruidoso de la liga.
Patriots y Chiefs se enfrentan en Playoffs apenas por segunda ocasión. New England ganó el único antecedente 27-20, en la Ronda Divisional de la campaña 2015. Kansas City lidera la serie histórica (incluyendo postemporada) 18-15-3.
KC buscará revancha del único duelo en Playoffs y de la derrota de poder a poder de octubre 14, ganándole a los Pats para ser acreedores del trofeo Lamar Hunt, en honor al fundador de los Chiefs, que se entrega año con año al equipo campeón de la AFC.
Patrick Mahomes escribió un cuento para los anales de la historia con su formidable campaña a nivel de MVP, donde seguramente será condecorado como el Jugador Más Valioso del 2018. El quarterback de segundo año se ganó la confianza de la oficina de los Chiefs, que dejó ir al veterano Alex Smith a Washington, y se la jugó con el joven de 23 años que acabaría lanzando 5,097 yardas y 50 pases de touchdown, con un juego agresivo y fantástico donde logró liderar 12 triunfos.
Los Chiefs se mantuvieron imbatidos en el arranque de la campaña hasta ponerse con récord de 5-0 y perdieron el invicto precisamente ante los Patriots en la Semana 6 en su visita al Gillette Stadium. Aquel juego de domingo por la noche fue un agasajo donde New England llegó a estar arriba 24-9 al medio tiempo, y Kansas City sacó la casta al final hasta emparejar el juego 40-40 y perderlo en el último drive gracias a un gol de campo de Gostkowski. Tom Brady y Mahomes lanzaron para más de 340 yardas cada uno, aunque el veterano solo tiró un TD, mientras Pat logró cuatro anotaciones.
Ese juego a media temporada con más de 80 puntos es solo una muestra de lo que nos espera en otra edición nocturna de domingo pero con papeles invertidos. Ahora los Chiefs jugarán en casa, donde tendrán el apoyo de más de 80 mil almas para detener al gigante y seguir el sueño.
Los Chiefs nunca han jugado un juego por el título de la AFC en el Estadio Arrowhead y esperan que el domingo puedan hacerlo para disputar su primer Super Bowl en medio siglo, cambiando los nombres de Len Dawson, Emmitt Thomas y Otis Taylor por Mahomes, Tyreek Hill y Travis Kelce.
Los Patriots no son favoritos por primera vez desde el campeonato de la AFC contra los Broncos en 2013, donde perdieron en Denver ante Peyton Manning, pues Chiefs parte con -3 para las casas de apuestas en Las Vegas.
El duelo entre dos entrenadores en jefe veteranos como Andy Reid y Bill Belichick ha dado mucho de qué hablar en la semana, pues ambos se conocen tras el Super Bowl XXXIX, donde los Pats se impusieron ante los Eagles del coach bigotón. Dos estilos distintos definen a estos estrategas, que rindieron elogios al rival y los jugadores del otro equipo, a lo largo de estos días previos al partido.
Tanto Patriotas como Jefes tienen a jugadores importantes en ambos lados de la pelota, aunque destacan sus figuras en ofensiva con la explosividad y velocidad de Tyreek Hill ante la irreverencia y espíritu combativo de Julian Edelman. Dos receptores slot espeluznantes. El duelo de alas cerradas elite también acapara los reflectores con Kelce viviendo un momento de ensueño incluso por encima de Gronkowski, de quien hay rumores vuelve a considerar el retiro.
En el juego terrestre, los dos son fuertes pese a que los Chiefs perdieron a Kareem Hunt tras la polémica del video donde golpea a una mujer. Kansas City tiene a un corredor seguro como Spencer Ware, a Darrel Williams y al fenomenal Damien Williams con su aceleración. New England posee a un tanque importante en el novato Sony Michel, quien viene de una actuación de 3 TDs, junto a Rex Burkead para el juego de poco yardaje, y a un experto en recepciones como James White, valuarte en el regreso del Super Bowl hace dos años.
Más allá del frente a frente entre pass rushers como Chris Jones y Trey Flowers, la fortaleza de los linebackers liderados por Justin Houston y Dont’a Hightower y los profundos con la agilidad de Kendall Fuller y Stephon Gilmore más la fiereza de Eric Berry y Devin McCourty, ambas defensivas gozan de una cualidad de presionar al pasador rival para hacer más incómodo su trabajo.
Precisamente ahí es donde viene el duelo más importante de todos y donde estriba la mayor duda. El Tom Brady contra Patrick Mahomes. La leyenda contra la revelación. Dos quarterbacks con caminos muy distintos pero objetivos similares. Mientras uno va por su noveno viaje al Super Bowl y levantar su sexto título, otro inicia su andar en la NFL en busca de la gloria, y lo quiere hace precisamente siguiendo los pasos de su rival del domingo: saliendo campeón en su segundo año.
Para lograrlo, el #15 de KC deberá vencer al líder histórico en victorias en postemporada de la NFL (28), y también en yardas aéreas (10,569) y pases de touchdown (72), Tom Brady. No por nada le dicen the G.O.A.T. (el más grande de todos los tiempos). Mahomes espera igualar al legendario mariscal en otro aspecto, ser el cuarto QB en lanzar 5 mil yardas que alcanza el Super Bowl, hito que solo lograron los mejores de la historia: Dan Marino (1984), Peyton Manning (2013) y el propio Brady (2011). El Juego por el cetro de la AFC será impactante, por entorno, historia y por la gloria.