Las jugadoras del Barcelona que ganaron la Supercopa de España femenil tuvieron que ir a una mesa a recoger sus medallas de campeonas tras vencer a la Real Sociedad y no se las colgó al cuello el presidente de la RFEF, Luis Rubiales.
Campeonas del Barcelona tuvieron que ir ellas mismas por sus medallas
Las ganadoras de la Supercopa femenina no recibieron sus premios de manos del presidente de la RFEF.
La final de la Supercopa entre las jugadoras del Barcelona y la Real Sociedad dejó una polémica que hirvió en las redes sociales, pues difiere mucho de la entrega de medallas que se vio en el torneo para varones, donde todos los jugadores recibieron de mano del presidente de la Real Federación Española de Futbol, Luis Rubiales, sus medallas y además se las colgó a cada uno en el cuello.
En el caso de la versión femenil del torneo, los premios se colocaron en una mesa a orillas del campo del estadio José Fouto para que las jugadoras de ambos equipos las recogieran ahí y se las colgaran ellas mismas.
Las redes sociales hicieron viral el momento.
La razón que dio la Federación fue por el elevado número de representación institucional y la infraestructura para el acceso desde el palco desde el campo, por lo que procedieron a realizar el protocolo de la forma en que se lleva en la Copa del Rey, entregando la Copa a la capitana en el palco y las medallas a entregarse en el campo o en los vestidores.
Así lo justificaron en un comunicado posterior a la viralización en las redes sociales del evento donde los internautas se quejaron de una falta de respeto.
El director técnico del equipo, Jonatan Giráldez dijo que en ese momento no se dio cuenta y que vio el efecto del protocolo en las redes sociales, pero al final aceptó que “se pudo haber buscado una manera para dar las medallas como toca”.
A pesar de haber celebrado juntas previas para la organización de la semifinal y la final donde se trataron diversos temas, nadie dijo nada acerca del protocolo de premiación. “Sabíamos que habría una entrega de medallas, pero nadie nos había dicho nada de las mesas” señalaron fuentes de los equipos.
Al final, la justificación de la Federación fue que se escoge el protocolo por las condiciones de las instalaciones de un campo que es antiguo y pequeño y que armar un pódium de premiación en el campo habría retrasado unos veinte minutos la ceremonia de premiación.
La Asociación de Futbolistas Españoles se mostró crítica por el asunto publicando un comunicado donde destacaron que “las futbolistas del Barcelona y la Real Sociedad fueron menospreciadas durante el momento de recoger sus medallas de campeonas y subcampeonas”.
La atención del tema se centró en el hecho de la relación de Luis Rubiales y el escándalo de las jugadoras del Barcelona que habían renunciado a jugar en la Selección de España y “se hablaba que Rubiales quería evitar algún desplante de las jugadoras del Barça”, dijeron fuentes desde el interior de la Real Sociedad.
Desde el Barcelona dijeron que no creen que el tema haya sido ese, pero que el verdadero problema es que “la nota debió ser el campeonato y no la entrega de los trofeos”.