A pesar de jugar de visitante, el público peruano recibió de la mejor manera al crack del Inter Miami e incluso poco antes del final del partido hubo una invasión de hinchas locales que intentaron saludar al jugador rosarino.
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Se jugaban los minutos reposición del segundo tiempo cuando un joven logró burlar a la seguridad del estadio y corrió directamente hacia el capitán de la Albiceleste para darle un abrazo y tomarse una foto del momento.
Rápidamente llegaron unos agentes de seguridad y comenzaron a sacar al adolescente a la fuerza, pero segundos después ingresaron otros dos jóvenes peruanos, aunque ninguno logró acercarse hasta Messi.
De hecho, uno de ellos fue detenido por el arquero Pedro Gallese, que molesto por lo sucedido incluso ayudó a detenerlo y le sacó el celular de la mano y lo arrojó con toda su fuerza fuera del campo de juego.
Tras sacar a los invasores, el árbitro Jesús Valenzuela reanudó el partido y apenas un minuto después daba por terminado el encuentro.
Con la victoria, Argentina lleva puntaje perfecto tras cuatro fechas y es líder la tabla de posiciones, con cinco puntos de ventaja sobre el escolta, Brasil, que este martes perdió 2-0 contra Uruguay.
