De la selección rusa estará pendiente todo el país de Rusia, incluido el presidente Vladimir Putin, que esta semana dijo por televisión que espera que el equipo "esté a la altura".
Vladímir Putin le pone presión a la Selección de Rusia en Copa Confederaciones
El Presidente de Rusia emitió un mensaje en el que dejó en claro que espera que "su selección esté a la altura".
Tras años de decepciones futbolísticas, las autoridades federativas nombraron como seleccionador a Stanislas Cherchesov con el fin de renovar un equipo que no daba para más (eliminado en la pasada Eurocopa con un punto en tres partidos) y hacerlo competitivo para enfrentarse de tú a tú a sus rivales.
"El presidente ha hablado del equipo nacional en este evento tan importante y eso no nos deja indiferentes", respondió Cherchesov.
"Dijo que hemos progresado y eso quiere decir que sigue a la selección... pero si es posible hablemos de fútbol", añadió el técnico ante la prensa visiblemente contrariado.
Pero el éxito deportivo no es la primera preocupación de un país que se enfrenta a numerosos desafíos en este torneo en vistas a lo que será el Mundial del próximo año.
"Rusia está completamente preparada. Las infraestructuras, los estadios, los hoteles y los transportes están listos. Y hemos tomado todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad", insistió el viernes el viceprimer ministro ruso y responsable de Deportes, Vitali Mutko.
La cuestión de la violencia de los hooligans rusos, que protagonizaron violentos enfrentamientos con los hinchas ingleses en Marsella en la Eurocopa de hace un año, no debería ser relevante durante la Confederaciones, habida cuenta del escaso número de seguidores extranjeros que se desplazarán para ver en directo este torneo.