Boca Juniors: Sus intentos para ganar la Final en el escritorio y el miedo a un doping positivo

La única forma que encontró la directiva de Boca Juniors para aplazar la Final de la Copa Libertadores y que, por lo menos se dieran un día de descanso, fue firmar una carta de intención para disputarlo este domingo pese a la emboscada que sufrió el autobús de Boca Juniors por parte de hinchas de River Plate, así como de la violencia que se generó en los alrededores del estadio Monumental entre los propios aficionados millonarios.

Sin embargo, desde antes de que se lograra aplazar el cotejo, los jugadores de Boca Juniors tenían una clara postura: No desean jugar la vuelta tras los hechos violentos en los que Pablo Pérez resultó con una úlcera en la córnea, aunado a que varios jugadores presentaban mareos y vómitos. Así lo hicieron saber los futbolistas a través de dos de sus líderes, Carlos Tevez y Fernando Gago.

Por ello la directiva xeneize se reunió en la madrugada con los abogados del club para analizar las posibilidades de ganar la Final de Copa Libertadores en el escritorio, amparándose en el artículo 8 de la Conmebol, inciso dos:

“Las Asociaciones Miembro y clubes son responsables de la seguridad y del orden tanto en el interior como en las inmediaciones del estadio, antes, durante y después del partido del cual sean anfitriones u organizadores. Esta responsabilidad se extiende a todos los incidentes que de cualquier naturaleza pudieran suceder, encontrándose por ello expuestos a la imposición de las sanciones disciplinarias y cumplimiento de las órdenes e instrucciones que pudieran adoptarse por los órganos judiciales”.

De aplicarse el reglamento, Boca Juniors sería Campeón por decreto. Pero de acuerdo al diario La Nación de Argentina, la directiva xeneize siente que es una pelea que no puede ganar, que hay muchos intereses económicos de por medio, incluso se planteó la posibilidad de jugar sin afición, pero es un recurso que la directiva de River Plate y los dirigentes de Conmebol han bloqueado del todo. Aunque Boca deba jugar el partido este domingo, de cualquier forma se plantearía pedir la victoria en la mesa.

Y justo en la mañana de este domingo, los dirigentes del conjunto azul y amarillo dejaron clara su postura ante la Conmebol, en la que piden que el partido se postergue debido a que no existen las condiciones de seguridad e igualdad para que se lleve a cabo el cotejo, además de que solicitan se apliquen los castigos correspondientes a la directiva de River Plate ante la violencia del sábado.

Otro de los puntos que preocupa a la directiva xeneize es que los jugadores que estuvieron expuestos a los gases lacrimógenos como Tevez, Gago, Wanchope Ábila, Cardona, Benedetto y Almendra, fueron atendidos por médicos de la Conmebol, quienes les suministraron dosis de corticoides. El problema es que es sustancia prohibida para la alta competencia, nadie firmó algún documento donde quedara asentado el uso ante la contingencia del sábado, uno de estos jugadores podría llegar al antidoping y, ahí, Boca Juniors también podría perder en el escritorio. Final convulsa.