La salud de Diego Armando Maradona sigue sin ser la mejor, aceptó su médico de cabecera, Leopoldo Luque, quien indicó que el 'Pelusa' ha tenido recientemente algunos problemas de alcohol.
Doctor de Maradona acepta que su paciente tiene problemas de alcohol
El galeno habló sobre el estado médico del astro argentino y señaló que sus problemas familiares le afectan mucho.
Asimismo, hizo hincapié en que estar confinado debido a la pandemia por coronavirus, aunado a sus problemas familiares, ha causado estragos en él, no obstante, negó que el exfutbolista "vive empastillado", como algunos rumores sugieren.
“Él, por momentos, tiene excesos con el alcohol y por momentos no. Este parate, esta cuarentena, estos problemas familiares son terribles para él. Entonces cuando escucho que es un tema de pastillas... No, eso es simplificar un problema que tiene un sistema de comprensión más alto, que tiene que ver con la contención familiar. Esto es atípico, esta cuarentena", aclaró para el programa Intrusos de la televisión argentina.
Los muchos percances que ha tenido el campeón del mundo en México 86 con las drogas han quedado atrás, afirmó el galeno, quien conoce al exjugador desde hace mucho tiempo, "Diego está limpió de cocaína, completamente. Acá la idea no es venir a cubrir ni defender a nadie, sino encontrar claridad en cosas que escucho”.
El médico agregó que "Maradona es un paciente difícil, particular y todo el mundo lo sabe. El esfuerzo que hacemos con todo el equipo es terrible para lograr lo mejor que se pueda con él. Mi prioridad es Diego y su salud; es una persona que varía en su estado de ánimo y sus hábitos, que a veces son diferentes y tienen un resultado negativo en su salud. La verdad es que le estamos encima y a veces el resultado no es el esperado, pero eso de las pastillas es una barbaridad”, apuntó.
El tema familiar tampoco es el mejor para el actual estratega de Gimnasia y Esgrima La Plata, quien pasa la cuarentena solo con un sobrino y un amigo, algo que afecta directamente en su estilo de vida, admitió el galeno.
"Si uno está mal de ánimo repercute en lo que uno come, en lo que uno toma. Cuando lo veo, trato de hablarle de cualquier cosa menos de estos líos. Yo no tomo partido por los problemas familiares. De lo que doy fe es que cuando escucha esto le hace mal. Me dijo que desearía tener a todos sus hijos juntos. Habla sobre esto y se quiebra, me dice que sufre mucho”, concluyó.