MARSELLA, Francia - Una refriega entre unos 200 aficionados ingleses y jóvenes locales en el centro histórico Marsella ha puesto en alerta a las fuerzas de seguridad francesas con miras al partido entre Inglaterra y Rusia por la Eurocopa de fútbol en esta ciudad portuaria.
Aficionados ingleses protagonizan disturbios en Marsella previo al arranque de la Euro
Una refriega entre unos 200 fanáticos ingleses y jóvenes locales de Marsella pusieron en alerta a las fuerzas de seguridad francesas.
Las escaramuzas la noche del jueves evocaron los violentos enfrentamientos entre 'hooligans' ingleses, aficionados tunecinos y residentes locales de origen norafricano durante la Copa del Mundo en 1998.
Ahora, las autoridades francesas se alistan para lidiar con las decenas de miles de hinchas de Inglaterra y Rusia que estarán en la ciudad para el partido en el Stade Velodrome.
Cuatro agentes de policías sufrieron heridas leves y dos personas fueron detenidas en los incidentes registrados, informó el viernes el portavoz del Ministerio francés de Interior Pierre-Henry Brandet. No se dio a conocer la nacionalidad de los detenidos.
El gobierno garantizará una seguridad extra en las zonas para aficionados en Marsella las noches del viernes y el sábado, añadió Brandet.
"La UEFA lamenta las escaramuzas registradas ayer en Marsella", indicó la entidad rectora del fútbol europeo en un comunicado. "Confiamos en que la seguridad de los aficionados visitantes será garantizada por las autoridades locales, que son responsables del orden en la ciudad. Pedimos a todos los aficionados que se comporten de forma respetuosa durante todo el torneo".
En el mismo sentido se manifestó la Federación Inglesa de Fútbol (FA, por sus siglas en inglés), e hizo un llamado a los aficionados ingleses a que "actúen de forma respetuosa y disfruten el partido ante Rusia".
A través de un comunicado publicado en su página web, la FA indicó que está "tremendamente decepcionada" por "los disturbios del jueves por la noche y condenó este comportamiento".
La trifulca en Marsella comenzó ante un pub irlandés en el distrito del Puerto Viejo de la ciudad mediterránea, y según los testigos fue rápidamente sofocada por la policía, que empleó gas lacrimógeno para restaurar la calma.
Anthony Heraud, el gerente de 34 años del pub irlandés O'Malley's, indicó a The Associated Press que los jóvenes locales incitaron las peleas.
"Tuvieron unos cruces de palabras, pero nada demasiado fuerte", dijo Heraud. "Los ingleses se portaron bien. Se divertían, cantando mucho. Pero sin causar problemas".
Un reportero de AP pudo observar a hinchas arrojándose botellas y sillas de plástico. La policía empleó gas lacrimógeno y agentes antimotines con escudos separaron a los dos bandos.
Heraud señaló que el reforzamiento de la seguridad mantendrá el orden durante las próximas 48 horas, de modo que no se repita lo ocurrido durante el Mundial de 1998. Entonces, cientos de hinchas ingleses se vieron involucrados en reyertas con residentes locales en Marsella antes y después del partido de Inglaterra ante Túnez.
Un inglés resultó herido con un corte en el cuello y se destruyeron los ventanales de cafés en los desmanes. Los incidentes atizaron aún más la pésima fama de los hinchas inglesas tras lo peor de los hooligans en las década de los 70 y 80.
Sin embargo, en recientes torneos, los ingleses han sido elogiados por su comportamiento.
Inglaterra y Rusia se enfrentan este sábado en la primera jornada del grupo B, en el Stade Vélodrome de Marsella. Unos 1,100 policías en las inmediaciones del estadio y otros 650 en la zona de aficionados vigilarán este partido, que ha sido calificado de alto riesgo.
Seis detenidos en el concierto de inauguración de David Guetta
Por otro lado, al menos seis personas fueron detenidas por delitos “clásicos”, según la policía, en el macro-concierto inaugural de la Eurocopa, celebrado también la noche del jueves en la Explanada de la Torre Eiffel y que congregó a 85 mil personas.
Según fuentes oficiales, los detenidos fueron arrestados por estado de embriaguez, consumo de productos ilícitos o portar armas prohibidas.
El prefecto de Policía de París, Michel Cadot, quitó importancia a los arrestos por su número y por los delitos cometidos presuntamente por los detenidos.
“Fueron actos clásicos y banales en una concentración de 85,000 personas”, estimó el prefecto de la capital de Francia, que se encuentra en estado de máximo nivel de alerta antiterrorista.
Un imponente dispositivo de seguridad, compuesto por alrededor de 1,400 agentes, entre policías, gendarmes y agentes de seguridad, vigiló el concierto gratuito celebrado durante la inauguración de la “fan zone” de París.
El área, de 130,000 metros cuadrados, fue abierta al público la víspera en medio de fuertes medidas de seguridad, que incluyen un doble perímetro de seguridad y numerosos controles.