Hace siete años, Porto anunció la contratación de los mexicanos Héctor Herrera y Diego Reyes, quienes abrieron paso a que los Dragones lucieran tricolores con los fichajes posteriores de Jesús ‘Tecatito’ Corona, Miguel Layún, Raúl Gudiño y Omar Govea.
Héctor Herrera y Diego Reyes dieron paso a los ‘dragones aztecas’ en el Porto
A partir de su fichaje en el verano del 2013, causaron un impacto positivo en el club lusitano ganando títulos, creciendo números en redes sociales y abriéndole las puertas a cuatro compatriotas.
De acuerdo con el sitio especializado transfermarkt, Porto pagó 11 millones de euros por Herrera al Pachuca y 7 millones por Reyes al América para reforzar al equipo de cara a la temporada 2013-14, donde inmediatamente se coronaron ganando la Supercopa de Portugal.
Herrera tuvo mejor fortuna que Reyes, pues se hizo de un lugar en el XI inicial desde su llegada y fue una pieza importante del club lusitano en las seis temporadas en las que estuvo -a tal punto de convertirse en el capitán- antes de terminar su contrato para firmar con el Atlético de Madrid.
Mientras que, Reyes nunca pudo consolidarse en el Porto y tuvo que marcharse cedido a España en dos ocasiones: en la temporada 2015-16 a la Real Sociedad y en la 2016-17 al Espanyol, en ambos clubes fue titular y estos estuvieron interesados en ficharlo tras su préstamo, pero la alta cantidad que pedían los Dragones fue el impedimento.
El ‘Tecatito’ Corona llegó al Porto en el verano del 2015 procedente del Twente de Holanda a cambio de 10.5 millones de euros y de a poco se ha convertido en uno de los referentes de los Dragones gracias a su versatilidad por las bandas; el mexicano ha destacado en la interior por derecha, por izquierda y hasta de lateral derecho, posición en la que está brillando en la actual temporada registrando 19 asistencias y cuatro goles en todas las competiciones.
Herrera y Reyes se reencontraron en el Porto para la campaña 2017-2018, y junto al Tecatito, ayudaron a los Dragones a ganar la Primeira Liga y con ello desbancaron al Benfica, su acérrimo rival, de su reinado por cuatro años consecutivos.
Miguel Layún aterrizó al Porto en verano del 2015 tras un préstamo del Watford inglés, y medio año después, los Dragones se hicieron del lateral mexicano por seis millones de euros, donde permaneció hasta enero del 2018 para después ser cedido al Sevilla y en el siguiente mercado de transferencias fue vendido al Villarreal.
Raúl Gudiño y Omar Govea tuvieron una historia parecida. Porto logró la cesión del portero canterano de Chivas en el verano del 2014 y gracias a su buen desempeño en el Porto B decidió ejecutar la opción de compra un año más tarde por 1.5 millones de euros. Lo mismo pasó con el entonces mediocampista del América, que fue prestado en el verano del 2015 y comprado en el 2016 por 2 millones.
Ambos lograron destacar en el equipo de la segunda división, pero en la máxima categoría lusitana carecieron de oportunidades por lo que Gudiño se fue cedido al Unión Madeira y al APOEL de Chipre, donde se convirtió en el primer portero mexicano en disputar un partido de UEFA Champions League, antes de su regreso al futbol mexicano en 2018 con Chivas.
Por su parte, Govea se fue a la liga de Bélgica con el Royal Excel Mouscron, posteriormente al Royal Amberes y en el verano del 2019 finalmente fue transferido del Porto al Zulte Waregem, donde se consagró como titular y disputó 24 partidos con un saldo de cinco goles y dos asistencias.
A partir de los fichajes de Herrera y Reyes, Porto tuvo un gran impacto al aumentar en gran cantidad sus seguidores e interacciones en sus redes sociales gracias a la comunidad mexicana, y les abrió la puerta a sus compatriotas a una de las ligas con mejor proyección en Europa.
Ahora, es tiempo de hacernos la siguiente pregunta.... ¿quién será el próximo Dragón azteca?