Tras la Fecha FIFA, Néstor Araujo no fue convocado por el cuerpo técnico del Celta, la defensa lo resintió y pronto se pusieron 0-2 en contra ante el Villarreal; sin embargo, una gran reacción encabezada por Iago Aspas le dio la victoria al conjunto de Vigo que le permite respirar pese a que todavía se mantiene en los puestos de descenso.
Araujo no fue convocado para la gran remontada del Celta de Vigo sobre el Villarreal
Un doblete de Iago Aspas le dio la victoria al cuadro celeste, lo que le da un poco de aire pese a que todavía está en puestos de descenso.
El equipo vigués se refugió en los goles de Aspas, que volvía a los campos después de tres meses de lesión, para romper su crisis de resultados y acercarse a la permanencia.
No necesitó elaborar muchos pases el Villarreal para crear peligro. Esos avisos se concretaron con dos goles, sencillos para el conjunto visitante, facilitados por la débil zaga celeste. Tras un tiro de esquina, la pelota llegó al lado contrario, donde apareció solo Mario para sacar un cómodo centro que empujó a gol Ekambi.
Tres minutos después, Pedraza avanzó treinta metros con el balón en los pies, sin apenas oposición, libre, se fue dentro del área de Costas, Brais, Lobotka, regateó al portero Rubén y marcó.
Con dos goles en el primer cuarto de hora, el Villarreal silenció Balaídos, que silbó las numerosas imprecisiones de pase de su equipo, la falta de juego, el escaso carácter combativo. Ni tan siquiera la presencia de Aspas agitó al Celta. Sus ocasiones fueron escasas: un tiro de esquina muy cerrado que tuvo que despejar Asenjo, un par de disparos lejanos de Brais y un tiro forzado de Aspas.
Fran Escribá no hizo cambios en el descanso. Pero la disposición del Celta fue distinta. Se apoderó de la pelota, Aspas intervino más en el juego, con un ritmo más alto el equipo vigués encerró al Villarreal. Se animó Balaídos, que explotó a los cinco minutos de la segunda parte con un magistral lanzamiento de falta de Aspas que acabó en gol.
El tanto del empate llegó mediada la segunda parte cuando Maxi Gómez cabeceó un buen centro de Olaza. No decayó ahí el empuje local. Continuó el Celta con su acoso, superior, con el Villarreal hundido, sin respuestas, sin capacidad de reacción.
Cerca del final, en el minuto 82, el Celta tuvo su premio: Víctor Ruiz derribó a Brais dentro del área, el VAR asesoró al árbitro y Gil Manzano pitó un penalti que marcó Aspas, el eterno héroe de Balaídos, un gol para certificar la remontada celeste y para que se sueñe con la permanencia.