Preocupa falta de gol de Atlético de Madrid en ‘Era Simeone’

El Atlético de Madrid, donde milita el mexicano Héctor Herrera, llega a su segunda pausa de esta temporada por los partidos de selecciones tras un decepcionante empate ante el Valladolid (0-0) y con datos que llaman a la reflexión: es el equipo que menos goles marca (11) y el segundo que menos partidos gana (5) en la era del argentino Diego Simeone.

Desde que el entrenador rojiblanco se hiciera con las riendas del conjunto en diciembre de 2011, el actual es el peor arranque si atendemos tanto al número de goles anotados entre las ocho primeras jornadas de LaLiga y las dos primeras de la Liga de Campeones (11), como en cuanto al número total de encuentros ganados entre los diez de ambas competiciones (cinco victorias).

Ninguna temporada de las que ha iniciado el Atlético con su actual entrenador en el banquillo ha contado con menos tantos, aunque las dos precedentes estuvieron cerca (14 cada una), y quedan muy lejanos inicios goleadores como el del curso 2013-14, cuando los rojiblancos anotaron 26 goles en sus primeros diez partidos.

En el inicio de aquella temporada, la del campeonato de Liga y la final europea de Lisboa, Diego Costa marcó 10 goles en esa primera decena de encuentros (dos al Sevilla, al Osasuna y al Celta; uno al Rayo, Almería, Valladolid y Real Madrid), Raúl García aportó tres y David Villa otros dos.

Tampoco Álvaro Morata ha realizado el inicio de curso que se esperaba de él, con solo un tanto, el que supuso la victoria en la primera jornada contra el Getafe, y poco más de su participación, que es cierto que ha estado limitada por haberse perdido cuatro encuentros por un esguince de rodilla.

El portugués Joao Félix, que a sus 19 años se convirtió este verano en el fichaje más caro de la historia del club por los 126 millones de euros pagados al Benfica luso, es el único de los tres que ha disputado todos los encuentros y ha respondido con tres goles (Eibar, Mallorca y Lokomotiv) y dos asistencias, pero dejando una sensación de irregularidad, ya que ha alternado grandes detalles con encuentros prácticamente inadvertido, como el de ayer en Valladolid.