el soberbio derechazo de Carlitos Morales que pone a los suyos a una unidad de Jaguares en la tabla de cociente.
Estrenando entrenador en la persona del argentino Pablo Marini, los michoacanos saltaron al césped a imponer condiciones frente a un Club Tijuana que lideró por varias jornadas el torneo anterior antes de desinflarse dramáticamente en la liguilla. El extremo Rodolfo Vilchis ingresó al área fronteriza y sirvió para el peruano Raúl Ruidíaz, quien acabó derribado ilegalmente por el portero Gibrán Lajud.
Era el minuto 25 y Carlos Adrián Morales hizo la diagonal hacia dentro. Como no observó a nadie desmarcado, apostó por pegarle con la diestra de parte interna y la pelota describió una bella trayectoria alejándose más y más de los brazos estirados de Lajud entrando por el ángulo.
Para fines prácticos ahí se terminó la historia del partido.
La escuadra de Miguel Herrera se mostró del todo inoperante y sólo un cabezazo desviado por parte de Milton Caraglio llevó algo de peligro al marco de Carlos Felipe Rodríguez. Avilés Hurtado, codiciado por el Club América, también pasó de noche por el Estadio Morelos.
Los minutos pasaron y fue en la compensación que uno de los campeones goleadores del Apertura 2016, Raúl Ruidíaz, estrenó su cuenta anotadora en el Clausura 2017. El peruano recibió entre los zagueros tijuanenses una asistencia rasa de Rodrigo Milla; con la impecable técnica tan característica de él, definió por debajo y mandó cobrar.
Monarcas vive, vive en la tabla de cocientes. Xolos ofreció una actuación tan mala que cabe decir que, en Michoacán, a este perro flaco se le cargaron varias pulgas.