El portero mexicano, que además fue capitán de su equipo, había jugado su último partido oficial el pasado 21 de abril con el Salernitana, en la Serie A de Italia.
El delantero se aferra al sueño europeo y fue anunciado como refuerzo del cuadro portugués luego de que no logró mantenerse con el Gil Vicente donde tuvo nueve juegos.
Ante el Famalicão el futbolista centroamericano marcó su tercer tanto del torneo y con la victoria su equipo terminó con una racha de cuatro partidos sin ganar.