No es que el Tri nunca hubiera enfrentado a un rival fuera de su zona geográfica futbolística -entiéndase repechaje- para clasificar a una Copa del Mundo.
Nueva Zelanda y los fantasmas recientes del Tri
México enfrentará a los kiwis en partido amistoso y recordará la historia del repechaje para Brasil 2014.
Lo había hecho en 1961 ante Paraguay, pero las circunstancias fueron diametralmente distintas a lo ocurrido en el 2013 frente a Nueva Zelanda.
Para llegar al duelo ante los sudamericanos, la FIFA determinó que el mejor de la Concacaf jugara ante ellos.
Debió pasar una eliminatoria larga y pesada en la que se eliminó primero con los rivales de Norteamérica, luego con los de Centroamérica y finalmente con los del Caribe para finalmente vencer a los paraguayos y clasificarse a Chile 62.
Pero para los duelos con los de Oceanía fue otra historia, aquello fue un calvario digno de una mala película de terror muy al estilo mexicano.
Cobró el puesto a tres técnicos y la estima futbolística del país solo fue salvada por una combinación de resultados, en la que un gol de Raúl Jiménez de último minuto ante Panamá y una victoria de Estados Unidos ante el mismo rival, tuvieron mucho que ver.
Una eliminatoria de pesadilla
Cuando la FIFA anunció que la Concacaf tendría tres lugares directos para el Mundial del 2014, el medio futbolístico mexicano miró de reojo, casi con desdén, que el cuarto sitio tendría un repechaje ante el primero de Oceanía.
La confianza se acrecentó una vez que libró la tercera fase de la eliminatoria - a la que entró directamente- de manera perfecta y de líder de su sector.
Jugó ante Costa Rica, El Salvador y Guyana, obtuvo seis victorias, marcó 15 goles y solo recibió dos.
José Manuel ’Chepo’ de la Torre era el técnico y la seguridad en el grupo era casi exultante, pero todo aquello se libró de muy mala manera. Principalmente por los resultados en casa y las determinaciones directivas en el hexagonal final.
En el Estadio Azteca se empató ante Jamaica, Estados Unidos y Costa Rica, pero lo peor fue el ‘Aztecazo’ ante Honduras. Por segunda vez en la historia, la Selección Mexicana cayó en eliminatoria mundialista en el Coloso de Santa Ursula, lo hizo 2-1 ante los catrachos.
Solo se ganó el duelo ante Panamá (2-1) con un golazo de chilena de Raúl Jiménez de último minuto y que finalmente resultó clave para clasificar al Mundial.
De visitante tampoco se libraron las cuentas de buena manera.
Igualó con Honduras, venció a Jamaica. Empató con Panamá y perdió ante Estados Unidos y Costa Rica.
A cada partido por el tipo de fútbol mostrado, sumado a los resultados obtenidos, las dudas aumentaban. Se fue generando un ambiente hostil y de preocupación en torno al grupo. De tensión a todos los niveles.
A todo ello se sumó, en ese 2013, la pobre actuación del equipo del ‘Chepo’ en la Copa Confederaciones -en la que no pasó de la primera fase- y la eliminación en semifinales de la Copa Oro ante Panamá, en junio y julio.
Tras el revés en casa contra Honduras, la cúpula de la FMF decidió cesar al ‘Chepo’ del cargo y dejó a Luis Fernando Tena -uno de los auxiliares- al frente del equipo.
Pero Tena solo dirigió la derrota ante Estados Unidos como visitante y luego fue removido en favor de Víctor Manuel Vucetich a falta de dos duelos eliminatorios. Restaban el encuentro ante Panamá en el Azteca y el de Costa Rica en San José.
A estas altura de la competencia, la posibilidad del repechaje ya no se miraba con desprecio sino como una posibilidad real de salvar aquella terrible campaña.
El duelo ante Panamá se libró con una victoria de 2-1 con el gol de Raúl Jiménez en los últimos minutos, con lo que un empate o una victoria ante Costa Rica representaba meterse al repechaje.
Pero el Tri cayó 2-1 en tierra tica y solo una inimaginable victoria de Estados Unidos ante los canaleros lo metió a la repesca.
El Team USA caía 2-1 en aquel duelo, pero Graham Zusi y Aaron Johannsson dieron la vuelta al marcador cuando ya se había rebasado el minuto 90.
Nueva Zelanda, la última esperanza
La Selección Mexicana alcanzó así un muy sufrido cuarto sitio en el hexagonal final y con ello la oportunidad de acceder al Mundial vía un par de juegos extra con Nueva Zelanda.
Pero antes, por qué no, corrió a Vucetich del cargo y puso en su lugar a Miguel Herrera que era el director técnico del América.
Por supuesto, el popular ‘Piojo’ tomó de base a las Águilas para aquellos vitales encuentros. Convocó a 10 jugadores de los de Coapa y encaró los enfrentamientos casi como un asunto de estado.
El primero se resolvió en el Estadio Azteca con un 5-1 sin demasiada complicaciones. Paul Aguilar, Raúl Jiménez, Oribe Peralta (dos veces) y Rafael Márquez anotaron los goles de los verdes, mientras Chris James hizo el de la honra para los de Oceanía.
El partido en el Westpac Stadium, en Wellington, tampoco fue demasiado difícil. Se saldó con un 4-2 a favor del Tri con tres tantos de Oribe Peralta y uno más de Carlos Peña.
Y México clasificó a Brasil 2014 con un global de 9-3.
Ahora México enfrentará de nueva cuenta a Nueva Zelanda, pero lo hará en un encuentro amistoso en Estados Unidos, muy lejos de aquel escenario casi apocalíptico-futbolístico que se pintó México solo para la ocasión.
Pero, finalmente, será un buen recordatorio, previo al próximo hexagonal final, de lo que ocurrió con el Tri en la última eliminatoria.
Revivir para no repetir, el momento más difícil del fútbol mexicano a nivel de selecciones de los últimos 30 años.