A Giovani dos Santos le sabe muy dulce jugar en la Gran Manzana

Giovani dos Santos es uno de esos jugadores que los partidos grandes, con glamour a su alrededor, en escenarios y ante rivales que definen una carrera, no se achica.

Nueva York es un gigante como ciudad, donde dicen que los sueños se hacen realidad, pero donde también pueden ser aplastados y devorados en su crueldad. No por nada el gran Frank Sinatra solía cantar, “Si puedo hacerlo allí (Nueva York), Lo haré en cualquier parte”.

Da la casualidad que Gio ya lo hizo en la Gran Manzana, ya triunfó en la “Jungla de Concreto”.

Corría el año 2009, ya habían pasado cuatro años de que Giovani llevara a México a lo más alto en un Mundial Sub-17. Javier Aguirre había tomado las riendas de la selección nacional mexicana por segunda vez, buscando rescatar el pase a Sudáfrica 2010. El “Vasco” confió en la camada de jóvenes mexicanos como Dos Santos, para encarar la Copa Oro 2009, lo que también sería el primer torneo internacional con la selección absoluta en la carrera de Gio.

La gran final del certamen de la CONCACAF se disputo en el ya demolido estadio de los Gigantes, precursor del MetLife Satdium. Y qué mejor que el rival del Tri fuera el archirrival, Estados Unidos, a quien México no derrotaba en territorio estadounidense desde hacía prácticamente una década.

Giovani lucio esa tarde, como todo un gigante, anotó el segundo gol (aquel con festejo dedicado a Belinda) de una histórica goleada de 5-0. Su actuación fue tan brillante, que se le otorgo el balón de oro de aquella edición de la Copa Oro, estuvo nombrado en el equipo ideal, pero más importante, le dio a México un título que no conseguía desde 2003.

Fue en Nueva York que Gio se consagró en la selección mayor, donde fue campeón por primera vez con la selección absoluta, y a partir de ahí vino una exitosa carrera con El Tri.

El romance de memorias agradables para el mexicano en La Gran Manzana no termino ahí, años después vinieron otras alegrías. Rumbo al bicampeonato de la Copa Oro 2011, con Gio como titular, en los cuartos de final vencieron a Guatemala en MetLife. Dos años, después, en 2013, en un amistoso ante la Costa de Marfil de Didier Drogba y compañía, Gio volvió a ser figura en la goleada de 4-1 para los verdes, incluido un pase de gol para Oribe Peralta.

Y al parecer no solo le va bien jugando en Nueva York, sino que también si el club de enfrente se llama New York City FC. El verano pasado, ya jugando para el Galaxy, Giovani y sus compañeros se dieron un festín en Los Ángeles ante los Citizens, al son de 5-1, el mexicano por supuesto fue parte de la fiesta con goles y asistencias.

Por lo que considerando su historial jugando en Nueva York y ante el club emelesero que juega en el Yankee Stadium, todo apunta a la combinación perfecta para que Gio tenga un memorable partidazo – y a muy malas noticias para NYCFC, el sábado por la tarde.