Toronto FC tiene un antes y un después muy marcado por la era de Sebastián Giovinco. Antes del italiano, los Escarlatas nunca habían gozado de disputar los Playoffs (2007-2014), durante su estadía lograron clasificarse durante tres campañas consecutivas (2015-17).
A la sombra de la era Giovinco: la trascendencia de Toronto, a la espera de Alejandro Pozuelo
El volante español se contagió de una irregularidad poco conveniente para los Escarlatas y sus chances de clasificar a Playoffs por primera vez sin el italiano.
En la primera temporada sin la ‘Hormiga Atómica’, las posibilidades de Toronto se han centrado en su fichaje estelar: Alejandro Pozuelo.
Analizado desde los números, lo del oriundo de Sevilla es destacable, habiendo anotado nueve goles y registrado nueve asistencias, encaminado a terminar con dígitos dobles en ambos departamentos. Sin embargo, en realidad su producción se dio en un lapso efímero, y desde entonces ha sido una especie de estrella fugaz que se hace presente de tanto en tanto.
En sus primeros cuatro partidos en la MLS, Pozuelo firmó cuatro goles y puso cinco pases de gol. Desde entonces, ha jugado otros 20 duelos por la liga norteamericana, en los cuales ha marcado cinco goles (promedio de uno cada cuatro partidos), y registrado cuatro pases para gol (uno cada cinco partidos). A eso hay que sumarle que en los últimos cinco partidos no ha marcado ni un solo gol ni registrado ni una sola asistencia.
El español se ha apagado. Eso explica en gran medida que la clasificación a la liguilla del conjunto canadiense esté en la cuerda floja, ya que se ubica en la séptima posición de la Conferencia Este – último puesto que otorga boleto a la fiesta grande.
Aunque cabe mencionar que la cuerda no es tan inestable. A favor de Toronto juega que el Este no tiene la fortaleza de otros años en sus clubes. Pueden ver el vaso medio lleno, ya que sus dos perseguidores, Montreal Impact y Orlando City, que están a uno y cuatro puntos de distancia respectivamente, van en caída libre en esta segunda vuelta de la temporada.
Y en teoría, podrían aspirar legítimamente a ubicarse hasta en el cuarto peldaño, ya que a un punto tienen a New England, a tres a New York Red Bulls – que tiene un partido más jugado, y a cuatro al D.C. United – que cuenta con dos partidos más disputados. Es decir, Toronto FC no tiene que preocuparse mucho por voltear abajo a ver dónde van sus perseguidores, y pueden escalar peldaños ya que cuentan con mano alta al tener menos partidos disputados.
Pero también existe el ver el vaso medio vacío cuando se analiza el calendario que le queda a Toronto en liga. Tienen seis partidos por delante, de los cuales solo dos son como local. Excepto por su visita a Cincinnati, tendrán que arreglárselas en casa del superlíder LAFC, el sublíder del Este NYCFC, y un Chicago Fire todavía con aspiraciones. Hasta hoy, Toronto solo ha ganado tres veces a domicilio en la campaña.
Los Escarlatas tienen al alcance meterse a los Playoffs por primera vez en su historia sin Giovinco, pero se antoja mucho más complicado si no encuentran la manera de que Pozuelo se aleje de la mala racha que ostenta hoy en día y deje la intermitencia a un lado para ser un protagonista recurrente que lleve al equipo a trascender en lugar de depender del mal momento de los de abajo.