LOS ÁNGELES, California -- Carlos Vela cambió de posición en su equipo, LAFC, para el partido de este sábado ante FC Dallas (1-1) y aunque no asistió ni marcó goles, el mexicano no solo tuvo una gran actuación sino que recibió una tarea de su entrenador: “ser como Messi”.
Bob Bradley dice que reta todos los días a Carlos Vela para que "sea el Lio Messi" de LAFC
Ante los elogios del entrenador, el mexicano respondió bajando el volumen y asegurando que se entrega al máximo cada día para ayudar al equipo
El nacido en Cancún venía jugando como creativo, casi como un 10 clásico. Pero ante la ausencia del costarricense Marco Ureña, operado este viernes por fracturas en su rostro, Vela estuvo como un 9 falso, saliendo y entrando de entre los dos centrales rivales y con más movilidad ante la última línea de FC Dallas, pero menos responsabilidades de creación.
“No es fácil”, dijo Carlos sobre la ausencia de Ureña. “Él pues que no haya marcado goles pero hace todo el trabajo sucio”, explicó el mexicano. “Con su trabajo Diego (Rossi) y yo tenemos más oportunidades”.
Para el entrenador Bob Bradley, quien decidió el cambio en búsqueda de mantener el fútbol ofensivo que ha caracterizado en su joven historia a LAFC, la posición pretende que Vela sea “nuestro Messi”.
Bradley se llenó de elogios para el mexicano, explicando las cosas positivas que aporta tanto dentro como fuera del terreno de juego al equipo y contó la motivación que le ha puesto. “Lo reto todos los días para que sea nuestro Messi”.
El número 10 de LAFC suma siete partidos, todos como titular, con tres asistencias y cinco goles. Al escuchar que su entrenador lo había comparado con el ídolo argentino y del FC Barcelona, el mexicano recurrió a su humildad para responder. “Eso son responsabilidades mayores”, aseguró.
“Estamos hablando del mejor jugador del mundo”, explicó Carlos, antes de llevar su argumento a la realidad de su club. “Creo que lo importante es la actitud y hacer lo mejor para mis compañeros. Trato de aportar lo mejor posible. Espero que les sirva.”
Vela tuvo al menos una oportunidad clara de anotar ante el FC Dallas, pero la pelota se fue muy cerca del palo izquierdo del arquero visitante. Ante esa y otro par de acciones para definir, que su equipo no aprovechó, Bradley mostró su autocrítica. “Creo que tuvimos el juego y no lo terminamos como quisiéramos”, aseguró. Y concluyó por ello que “en este día y por esa razón, perdimos dos puntos antes de conseguir uno”.
Aún así, el entrenador insistió en que se fue muy satisfecho con el funcionamiento de su escuadra.
El otro tema que mencionaron ambos fue el calor de un partido que se jugó a la una de la tarde de Los Ángeles con temperaturas cercanas a los 90 grados y en el que s presentaron los primeros dos recesos para hidratación de la temporada de MLS.
“Entiendo el calendario, pero si este juego se realiza de noche teníamos un mejor juego. Porque el calor definitivamente fue factor”, aseguró Bradley.
El mexicano por su parte hizo eco del asunto. "A mí no me gusta (la hora del partido). Demasiado calor para ofrecer un buen espectáculo”, dijo. Sin embargo Vela huyó de usar el asunto para respaldar el marcador. “Así es la liga, para los dos equipos es igual y no es pretexto”, concluyó el ‘Messi’ de LAFC.