Chicago Fire tiene nuevo dueño y a partir de 2020 jugará en Soldier Field

Con efecto inmediato, Chicago Fire tiene un nuevo propietario.

El viernes el club anunció que Andrew Hauptman, durante mucho tiempo presidente y propietario del club, vendió sus acciones a Joe Mansueto, quien se convierte en el nuevo presidente y único dueño del equipo.

Bajo el liderazgo de Hauptman, el Fire llegó a un acuerdo con la Villa de Bridgeview que le permite a la franquicia regresar a la ciudad de Chicago, y recibió la aprobación del Distrito de Parques de la ciudad de Chicago para avanzar hacia un acuerdo que permita jugar al club a partir de la temporada 2020 en el Soldier Field.

"Lo que el Fire ha logrado ha sido una transformación para el club y la ciudad de Chicago", señaló Hauptman a través de un comunicado oficial. "Hemos aumentado de manera significativa la presencia del fútbol y hemos construido un ecosistema que puede competir con cualquier otro en Norteamérica. Estoy extremadamente orgulloso del actual posicionamiento del club. Se que el próximo paso de regresar al Soldier Field enorgullecerá a Chicago y espero poder alentar a Joe, el club y sus aficionados mientras continúan con su legado".

Hauptman lideró al Fire durante 12 años, tras adquirir al equipo en 2007. En esta temporada el conjunto clasificó en dos oportunidades a los Playoffs y llegó a la final de la Copa Abierta de Estados Unidos en 2011.

Mansueto es el presidente ejecutivo de Morningstar, una empresa líder en el análisisde inversiones radicada en Chicago. Dejó el cargo de CEO de la firma a finales de 2016, y ahora lidera el próximo capítulo del Fire, enfocado en el centro de la ciudad de Chicago. Mansueto también es dueño de las revistas de Inc and Fast Company, y es parte de la junta del Art Insitute de Chicago y del Northwestern Memorial Hospital.

"Me uní a Andrew como socio porque desarrolló una tremenda plataforma para el crecimiento contínuo del fútbol en Chicago y más allá", dijo Mansueto en otro comunicado. "Él y toda la organización han trabajado incansablemente para incrementar el perfil del Chicago Fire Soccer Club, MLS y el deporte en general, y ha dejado un maravilloso legado para nuestra ciudad. El momento de esta transacción no podría ser mejor, mientras devolvemos al deporte mundial a la ciudad que amo. Andrew y su familia serán siempre parte de la familia delFire, por el que él tanto se preocupa".