Chicago Fire volvió a jugar su papel de aguafiestas y derrotó 2-1 a New England Revolution en el Toyota Park.
Chicago Fire venció 2-1 a NE Revolution y los dejó prácticamente sin opciones de meterse a los Playoffs
El atacante ghanés David Accam fue la figura de un encuentro en el que se terminó jugando con un hombre menos en cada equipo debido a un par de expulsiones.
Fire ya no tiene ninguna posibilidad de llegar a los Playoffs, pero si tiene la opción de arruinarle la chance a equipos como el Revolution, quien con el descalabro sufrido en la Ciudad de los Vientos, están obligados a ganar en la última fecha y esperar que Philadelphia Union pierda y además que los criterios de desempate le favorezcan.
Ya sin ninguna presión pero con la encomienda de darle una alegría a su público en su último partido como local en 2016, Fire no especuló y fue en busca del resultado desde el arranque.
El inicio no pudo ser mejor para el local con un gol antes de que llegáramos a los diez minutos de juego. Jugada entre el lateral Brandon Vincent y David Accam en la que el joven defensor envió un centro raso para que Michael de Leeuw empujara su sexto de la campaña.
Chicago creo varias jugadas para doblar la ventaja, pero tanto a David Accam como a Arturo Álvarez, Brad Knighton les atajó sus disparos casi a quema ropa.
New England generaba poco al frente pero a su cuarteto ofensivo le bastó con una chane para empatar en la recta final de la primera parte. En un intento de triangulación entre Juan Agudelo, Lee Nguyen y Kei Kamara, el balón quedó dividido en las afueras del área. Y el cuarto fantástico de los Revs, Diego Fagundez, no perdonó con un potente derechazo.
Las circunstancias le sonrieron a los Revs para que consiguieran el objetivo de meterse de lleno en la pelea por un boleto a los Playoffs, ya que Luis Solignac se fue expulsado temprano en la parte complementaria.
Un balón al travesaño fue lo más claro que genero New England en esos minutos con un hombre más. Pero a final de cuenta no hicieron valer la expulsión a su favor, y para los últimos 15 minutos acabaron jugando en paridad 10 vs. 10 tras la expulsión del portero Knighton.
Nuevamente en igualdad numérica, Chicago no desaprovechó su oportunidad de marcar el elusivo segundo gol. Este llegó en un servicio para que Accam se escapara a velocidad y fusilara al recién ingresado Bobby Shuttleworth.
El ghanés incluso pudo haber terminado con un doblete, pero se comió un gol increíble en el ocaso del partido.