Un auténtico duelo de multicampeones es lo que se avecina en los cuartos de final de la Liga de Campeones CONCACAF, cuando Toronto FC se vea las caras con los Tigres UANL.
Duelo de campeones de MLS y Liga MX: la final adelantada de la Champions League de CONCACAF
Los vigentes multicampeones de Norteamérica y México, Toronto FC y Tigres UANL, se verán las caras en una serie de poder a poder en cuartos de final.
Más allá de los otros posibles enfrentamientos que se den en esta edición de la LCC, esta es la serie que más fielmente debe reflejar la actualidad – en su mejor versión – que vive cada liga, enfrentando al indiscutiblemente mejor de la MLS contra el que arrasa en México.
Y aunque al final la gloria sea única y exclusivamente para el vencedor, es innegable e inevitable separar la idea de que Toronto le da la posibilidad a la MLS de demostrar que no está solo para competirle de cerca de la Liga MX, sino para dar un golpe de autoridad derrotando al poderoso club felino. Mientras que del otro lado del espectro, Tigres esta para corroborar que la liga azteca sigue mandando y que la hegemonía mexicana no terminará sucumbiendo ante el poderoso club Escarlata.
MUNDOS PARALELOS, MISMO ESPEJO
Diez años reflejados en el mismo espejo.
Toronto pasó temporadas, desde su llegada a la liga en la segunda parte de la década pasada, gastando en lo que su momento fueron contrataciones de alto perfil tanto de jugadores como de entrenadores. Pero los resultados en la cancha simplemente no se daban.
A finales de la década pasada, Tigres con toda su inversión, se la pasó viviendo en carne propia el infierno en la lucha por el no descenso.
El club canadiense hizo cambios drásticos y en algún punto trajo a un directivo consagrado de la MLS. Con el respaldo de una empresa con recursos en exceso, armaron un proyecto verdaderamente serio de pies a cabeza.
El club regio optó por hacer cambios, en su momento trajo a un entrenador y un consagrado del fútbol mexicano para la dirigencia. Con el respaldo de una empresa con recursos en exceso, armaron un proyecto verdaderamente serio de pies a cabeza.
Hubo frutos desde principios de la actual década para ambos.
Pero fue finalmente en 2015 que comenzó su época dorada.
En aquel año llegó Sebastián Giovinco, el crack que viste la ‘10’ Escarlata. El italiano se convirtió en la pieza clave que redondeó el proyecto del cuadro canadiense plagado de estrellas a nivel directivo y a nivel de futbolistas.
En aquel año llegó André-Pierre Gignac, el crack que viste la ‘10’ tigre. El francés se convirtió en la pieza clave que terminó de dar forma al proyecto del cuadro regiomontano poblado de estrellas a nivel directivo, cuerpo técnico y a nivel de futbolistas
LA ERA DE GIOVINCO, LA ERA DE GIGNAC: BAÑADAS EN ORO
Giovinco fue campeón goleador y el unánime MVP de la MLS. Mientras Toronto conquistaba un bicampeonato del campeonato canadiense, un Supporters’ Shield y una Copa MLS. Además de un subcampeonato de MLS Cup.
Gignac fue campeón de goleo y el unánime Balón de Oro de la Liga MX. Mientras Tigres conquistaba tres campeonatos de liga y dos 'campeón de campeones'. Además de un vicecampeonato de Liga MX, dos subcampeonatos de Liga de Campeones y uno más de Copa Libertadores.
Y por si fuera poco, así nada más como de paso entre que levantaban copas, ambos marcaron de manera contundente la historia de sus respectivos clásicos.
A pesar de sus logros recientes, ninguno de los dos es considerado aún como un grande o de los realmente históricos de sus ligas, pero sí de los “de moda”, de los emergentes, de los norteños que desafían sus climas extremos (uno con frio congelante, el otro con calor infernal) y se ganan a base de fútbol, títulos, la pasión de fanáticos y billetazos para contrataciones bomba, el reconocimiento (y odio) de los aficionados.
DE PODER A PODER, SIN EXCUSAS
Los dos cuentan con argumentalmente el plantel más poderoso de su respectiva liga, y por lo tanto, los más poderosos de la CONCACAF.
Son auténticas selecciones, llenas de extranjeros, en el cual su producto nacional se reduce a uno, dos, máximo tres jugadores (cuando parecen no tener otra opción) en el once titular.
Ambos salieron campeones de su respectiva liga en diciembre pasado, es decir, ni siquiera se han cumplido tres meses de dicha euforia.
Toronto llegará con 3 partidos oficiales jugados, a diferencia de otras ediciones cuando los 'emeleseros' llegaban directamente de pretemporada a estas instancias (y aun así hubo quienes llegaron a la final). Tigres estará en la recta final, tras jugarse la jornada 10 (para la ida) y la 11 (para la vuelta) del campeonato mexicano, justo cuando dejan su acostumbrado letargo para encender los motores para llegar a punto las instancias definitivas.
No hay excusa que valga.
Esta es la final adelantada de la CONCACAF.