Toronto FC firmó la mejor temporada en la historia de la MLS en 2017 al conseguir el triplete de manera avasalladora.
La Amenaza Escarlata: Toronto FC, el candidato para derrocar la dinastía de la Liga MX en Concachampions
Tras conseguir el histórico triplete de la MLS, el club canadiense es el aspirante más poderoso que apunta a ponerle fin a la hegemonía mexicana.
En pleno festejo tras conseguir la MLS Cup, con una declaración Sebastián Giovinco dejó al descubierto por qué el club canadiense cosechó éxito tras éxito en la campaña: una insaciable hambre de gloria.
Apenas habían pasado unos minutos de conseguir el triplete y el crack italiano apuntó al siguiente objetivo: “Intentaremos ganar la Champions de CONCACAF".
Toronto no se conformara “solo” con el histórico triplete, va por más. Y no es un deseo solo de los jugadores, sino un anhelo de toda la institución que incluso, al igual que con la MLS Cup previo a ganarla, ya tienen un espacio designado en la vitrina para lucir el trofeo continental. Así de clara es la ambición Escarlata.
UN PASADO CON POCA AMBICIÓN
La Champions de la región vive en una hegemonía, donde en las ultimas 12 ediciones, el campeón siempre fue un club de la Liga MX. Los equipos mexicanos rentabilizaron su poderío en México para luego conquistar el título de la región y obtener el boleto al Mundial de Clubes, año tras año.
Y si bien hubo un par de MLSeros que se quedaron cerca de cortar el dominio mexicano, el caso de Real Salt Lake y Montreal Impact, también es cierto que en un gran número de ocasiones los clubes norteamericanos menospreciaron la oportunidad única de ir al Mundial al tomar la Liga de Campeones como una pretemporada o competición de poca importancia – especialmente cuando comenzaban las instancias de eliminación directa en el mes de febrero/marzo.
Otro factor que le jugó en contra a clubes de la MLS – del cual son en parte culpables ellos mismos por no mantener una regularidad en la cima prolongada – es el tiempo de espera desde que conseguían su pase a la Champions y cuando comenzaban a participar en ella, un espacio de hasta un año para algunos.
LAS ARMAS ESCARLATAS
Pero para Toronto será diferente, tanto en la actitud hacia el torneo como en los tiempos.
El club canadiense abiertamente admite su deseo de ir con todo por el título, y entrara en acción en la CCL tan solo dos meses después de haberlo ganado todo, absolutamente todo, a nivel local.
A su favor, Toronto FC cuenta con argumentalmente el mejor plantel de la MLS, y una de las plantillas más profundas de la liga. Su localia pesa, por el apoyo de los fanáticos, por el frio congelante, por el largo viaje que los mexicanos y/o centroamericanos/caribeños tendrían que realizar. Tienen una ofensiva explosiva con capacidad de reacción ante la adversidad.
Cuentan con jugadores de la talla de Jozy Altidore, Michael Bradley, Giovinco y Víctor Vázquez que tienen experiencia europea en Champions/Europa League – incluso jugando en México con selección (Altidore, Bradley) o club (Vázquez) – que saben jugar en canchas difíciles y no se intimidan en escenarios de esa índole.
Y los “actores de reparto” de Toronto no son jugadores de promedio bajo, son futbolistas que tienen un importante bagaje, a diferencia de otros clubes de la MLS en Champions que contaron con algunas figuras pero el resto del plantel era desproporcionalmente inferior a comparación de los jugadores promedio de los planteles mexicanos.
LA HEGEMONÍA MEXICANA ESTARÁ EN JAQUE EN TORONTO
Sera muy complicado, sin duda, tomando en cuenta que los clubes mexicanos también parecen llegar con plantillas mucho más poderosas que en años pasados y que también buscaran un boleto mundialista que tienen como asignatura pendiente – en especial Guadalajara y Tigres.
Pero Toronto está acostumbrado a eso, a lo difícil. Después de todo, son el equipo que paso del hazme reír de la MLS, que logró apenas empezar a darle vuelta a su historial a partir del 2015, al multicampeón por excelencia.
Toronto es el equipo de la MLS que llega con las credenciales más altas y con los tiempos adecuados, a competir en la Champions League de la CONCACAF. Es el aspirante más serio en muchos años que tiene con qué para ponerle fin a la dinastía mexicana.