Hace apenas un par de semanas, Portland Timbers fue humillado en su propia casa por su archirrival, Seattle Sounders, con un escandaloso 6-2. Por lo que, en su visita al hogar de los Esmeraldas, era toda una cuestión de honor y de orgullo propio para los leñadores.
Cuestión de honor: Felipe Mora y Sebastián Blanco toman revancha en el clásico
Portland Timbers derrotó a Seattle Sounders a domicilio en el clásico de Cascadia con tantos de su goleador chileno y el crack argentino.
El club de Oregón tuvo su revancha en el clásico de Cascadia con un triunfo de 2-0 con goles de Sebastián Blanco y Felipe Mora.
La diferencia fueron un par de errores defensivo de los Sounders, los cuales los Timbers supieron capitalizar a la perfección.
Ante la pifia del zaguero colombiano Yeimar Gómez al minuto 58, Felipe Mora se quedo con el esférico y eludió la salida del arquero Stefan Cleveland. El ángulo de tiro quedo muy reducido, por lo cual el chileno inteligentemente opto por buscar a Blanco que venia entrando solo al área. Con una magnifica habilitación de tres dedos, Mora le dejo en bandeja de oro la anotación al argentino.
El dorsal 10 de Portland marcó por quinta ocasión en el pasional clásico de la MLS.
Previo a la anotación, los dos equipos habían acariciado la anotación, pero en ambas ocasiones, el travesaño fue quien les ahogo el grito de gol. Dairon Asprilla con un zapatazo de larga distancia para Portland, y Joao Paulo con un cañonazo para Seattle, hicieron temblar el arco.
Los Sounders tuvieron chances para empatar, pero una cuestión de centímetros y la intervención del guardameta Steve Clark, impidieron la remontada. En un tiro de esquina, Cristian Roldan remató de cabeza y el balón pego en la parte baja del travesaño. Mientras que otros amenazantes disparos de Paulo y Raúl Ruidíaz, fueron rechazados con el vuelo de Clark.
Ya en el tiempo de descuento, en un contragolpe los leñadores liquidaron el encuentro. Nuevamente Gómez se vio involucrado en un error defensivo en combinación con su portero, y una vez más Mora aprovecho para hacerse del balón. El chileno pudo haberle servido a Diego Valeri, pero en cambio ahora sí prefirió definirlo él mismo, techando con gran técnica a Cleveland.
Por merecimiento, los locales merecieron el empate. Pero también hay que señalar la mejora en los dirigidos por Giovani Savarese que pasaron de recibir media docena, a dejar en ceros a la poderosa ofensiva de los Sounders en cuestión de 15 días.