En las primeras cinco semanas de competición de liga en 2019 -traducidas en cuatro partidos para 'las Cinco Bandas'- Atlanta United ha distado mucho de sí mismo como ganador de la MLS Cup en el mes de diciembre.
¿Por qué 'Pity' Martínez no brilla en Atlanta United como sí lo hizo en River Plate?
El enganche argentino fue reconocido como el mejor jugador de Sudamérica en 2018, pero -por diversos motivos- todavía no logró mostrar toda su calidad en MLS con 'las Cinco Bandas'.
Con exageración, alguien podría decir que el conjunto de este año es absolutamente distinto al de 2018. Y eso no es cierto. La del enganche Miguel Almirón y la del entrenador Gerardo Martino son dos ausencias notables, pero el grueso del plantel que alzó el trofeo cuatro meses atrás es esencialmente el mismo.
A Martino lo reemplazó el holandés Frank de Boer, y Almirón fue sustituido por Gonzalo 'Pity' Martínez.
En competición oficial a nivel doméstico e internacional, Atlanta United luce y lució perdido desde el inicio de trabajo esta temporada, sin claves ni hoja de ruta. Ese mal afecta a todos los integrantes del equipo campeón, de un modo u otro. Y en gran medida eso puede atribuirse a los cambios tácticos y de posicionamiento que dispuso el nuevo cuerpo técnico, que inicialmente barrió con el trabajo de Martino y que hoy busca revivir algunos de los circuitos del pasado.
Pero si la táctica no funciona, ¿Por qué las individualidades no aparecen al rescate para solventar este mal momento? Atlanta fue un equipo récord en muchos sentidos la temporada pasada, pero este año todavía no conoce lo que es ganar un partido.
Y donde más se nota esa desconexión es en el sector de la cancha en el que más brilló el equipo en 2017 y 2018: el de la definición y la supremacía en el área rival. La dupla 'Miggy' Almirón - Josef Martínez fue demoleadora mientras duró, y llevó al venezolano a romper todos los récords de goleo en una temporada de Major League Soccer. Pero con el paraguayo emigrado a la Premier League, la magia de esa sociedad no se replicó todavía desde el arribo de 'Pity'.
Gonzalo Martínez tuvo en Argentina y Sudamérica un año 2018 tan espectacular como el de las figuras de Atlanta United. El mendocino condujo a River Plate a la obtención de una nueva Copa Libertadores, y fue elegido como el mejor futbolista del continente en diciembre. 'Pity' hizo todo lo que se espera de una gran estrella: asumió responsabilidades, se cargó el equipo al hombro en momentos complicados y -fundamentalmente- mostró un enorme repertorio de su talento como creativo y anotador.
Hoy podría estar en Europa, pero -por mayor impulso económico, por una oferta más convicente- es en este momento uno de los talentos de Atlanta United y fue recibido como una estrella por toda la Major League Soccer.
¿Por qué eso no se ha visto eso todavía en la liga norteamericana o en la máxima instancia para los clubes de Concacaf? Es complicado contar con una respuesta que explique o justifique en su totalidad la actual situación del 10. Pero no sería inteligente descartar situaciones humanas básicas y comprensibles como el desarraigo y la añoranza de su país natal. Es un problema normal, frecuente, con todo aquel que deja su país, especialmente en los primeros meses de experiencia en el extranjero. ¿Por qué no podría ocurrir eso también con Martínez?
Otra cuestión relevante es el hecho de que el mal momento de Atlanta lo esté afectando más de la cuenta. 'Pity' pasó de ser el referente de un River Plate que consiguió uno de los logros más importantes en la más que centenaria historia del club 'millonario' a convertirse en un recién llegado a un conjunto que sorprende por sus malos resultados iniciales en este año.
De Boer no es Martino, y ese es otro punto que hay que sumar al análisis. Más allá de la valoración
individual de uno y otro técnico, es altamente probable que Martínez haya comenzado a negociar su incorporación a Atlanta United cuando 'Tata' todavía estaba consolidado en el cargo y el anuncio de su fichaje por la selección mexicana era algo lejano.
Resultados al margen, el holandés no tiene el mismo trato o feeling con los integrantes de su plantel. El don de gentes de Martino es evidente, los códigos de trato personal quizás también sean distintos. Mucho dista entre lo imaginado por el jugador cuando estaba todavía en River y su presente ahora como futbolista del club rojinegro.
¿Falta de motivación? Martínez es un 'pura sangre', un jugador de alta calidad, con objetivos grandes en mente. Se hace complicado imaginar que el volante ofensivo no encuentre estímulos en un mercado nuevo para él, tan grande y con una buena dosis de exposición. Y más si se tiene en cuenta que Almirón logró dar el apreciado salto al fútbol europeo desde Atlanta United. 'Pity' está en una posición de privilegio; por lo hecho por él en River y por la expectativa generada con su llegada a MLS.
Una transferencia a futuro a la zona UEFA suena como algo lógico. Pero para lograrlo antes debe producir y demostrar en América del Norte. Por un motivo u otro Martínez todavía no ha puesto en marcha ese mecanismo de promoción a través de su talento en su nuevo destino.
'Condenado' a entenderse con Josef Martínez. El MVP de 2018 reconoció que no podría haber alcanzado las marcas del año pasado si Miguel Almirón no hubiera 'trabajado para él'. En 2019, 'Pity' necesita sumar el grado ese grado de entendimiento con el delantero estrella.
Más allá de su indiscutible talento a nivel individual, el argentino comenzará a ser trascendente en Major League Soccer cuando la liga lo reconozca como el nuevo asistidor de lujo de la máquina goleadora en la que se convirtió el 7 en 2018. Ambos se necesitan mutuamente. Sin excusas, sin recelos.
No es que todo esto le resulte extraño al ex jugador de Huracán y River. 'Pity' Martínez es conciente de que el equipo y él a nivel personal no están todavía a la altura de lo que se precisa. "No hemos estado al nivel que el club y el entrenador quieren", dijo semanas atrás. "Trabajamos duro para alcanzar el nivel que los muchachos mostraron el año pasado".
"No hay demasiadas vueltas: tenemos que seguir trabajando. Ésto es fútbol", insistió el argentino. "Tenemos que acostumbrarnos al entrenador y a lo que él quiere. Al intentar hacer lo mejor podremos llevar a Atlanta lo más alto posible".
Atlanta United no juega este fin de semana. Una situación que servirá para que Martínez pueda terminar de recuperarse de la lesión que contrajo en el amistoso de días atrás entre las selecciones de Argentina y Venezuela. La espera se extenderá hasta el sábado 13 de abril, cuando De Boer y sus futbolistas visiten a New England Revolution.