Vancouver Whitecaps preocupados por sus problemas defensivos: "Dimos dos goles a Portland"

La caída por 4-2 en casa de los Timbers cortó una racha de tres victorias consecutivas para Vancouver Whitecaps. Lo abultado del marcador final duele más debido a que al menos un par de los goles de Portland se debieron a errores de la defensa del equipo canadiense.

"Les dimos dos goles", dijo Carl Robinson tras el clásico de Cascadia. "Hay que dar crédito a Portland Timbers por lo que ellos hicieron en el primer tiempo", prosiguió el técnico. "Fueron mucho mejores que nosotros. Cometimos dos errores; cuando tienes dos errores tan malos y le das a un buen equipo esa ventaja de 2-0 las cosas se te van a poner muy difíciles."

"Respondimos bien en la segunda parte", agregó el galés. "Demostramos mucha personalidad. Creo que fuimos mejores que ellos en ese momento, pero volvimos a hacer regalos [a Portland Timbers] otra vez", lamentó el entrenador.

Los dos defensas centrales de los Whitecaps -Kandall Waston y Pa Modou Kah- fueron responsables directos de tres de los cuatro goles del equipo local. Kah 'creó' dos penales para los Timbers. Primero derribó en su área a Jack McInerney en el inicio del encuentro y en la segunda parte tocó el balón con la mano cuando quiso pasar la pelota al portero David Ousted. En el caso de Waston, el costarricense se resbaló en la puerta del área visitante y prácticamente entregó el que sería el segundo tanto de los Timbers, anotado por McInerney sobre la primera media hora de juego.

"En los dos primeros goles de Portland... No fuimos nosotros", dijo Robinson. "Habitualmente no le damos a un buen equpo la ventaja, pero en este caso lo hicimos", se lamentó el head coach.

El final del encuentro tuvo una situación bastante absurda como corolario. Después del silbatazo final del árbitro Waston fue expulsado por el árbitro Ted Unkel debido a una fuerte entrada contra el atacante colombiano Dairon Asprilla (quien regresó a la convocatoria de los Timbers después de 3 partidos inactivo).

En palabras del tico, no escuchó que el partido había finalizado. "No voy a ser tan estúpido como para seguir corriendo 20 metros después del término del partido", dijo -furioso- el defensor. "Corrí y fui a jugar la pleota, no le hice una entrada al jugador. Eso era lo que discutí al final del partido con el árbitro", argumentó Waston. "Simplemente, no escuché el silbatazo final."

En 2015 Vancouve Whitecaps fue el equipo con menor cantidad de goles recibidos en toda la MLS, pero en 2016 la historia ha sido bastante distinta. En 14 partidos jugados este año el equipo de la Columbia Británica ya recibió 24 goles, dos tercios de los 36 que concedió en la temporada pasada.