Raúl Jiménez atraviesa un momento crucial en su carrera futbolística; está a las puertas de dirimir si disputará o no la que pintaba para ser la Copa Mundial en la que llegara como el hombre clave de la Selección Mexicana: Qatar 2022.
Raúl Jiménez narra sus raras sensaciones tras su golpe en la cabeza
El delantero del Tri tuvo un largo proceso de rehabilitación en Inglaterra para volver a las canchas.
La razón de la incertidumbre que vive el actual delantero del Wolverhampton: una lesión en los aductores o pubalgia, como dicen los letrados, misma que lo tiene su actividad desde el 31 de agosto pasado. No obstante, si hay un futbolista del Tri con el carácter para salir adelante de este tipo de situaciones ese es el nacido en Tepeji del Río.
Tras jugar roles secundarios, casi terciarios, en Brasil 2014 y Rusia 2018, el actual delantero del Wolverhampton apuntaba a la edición mundialista de 2022 con ilusión pues atravesaba un gran momento de forma en Inglaterra. Mas el destino tenía otros planes para él: el 29 de noviembre de 2020 en partido de su club ante Arsenal, fue atropellado por David Luiz en un choque de cabezas en el que el mexicano sacó la peor parte. El resultado, un traumatismo que le provocó una fractura en el cráneo. No solo su carrera, sino su calidad de vida, estaba en el aire.
"Todo mundo estuvo siempre al pendiente de mí. Desperté y tenía mensajes de todos mis compañeros, entrenadores, todos. Toda la gente que está involucrada en la seleccion y del equipo de aquí también" le contó Raúl a Gibran Araige en charla exclusiva para TUDN. Luego de la operación a la que fue sometido, comenzó la lucha más dura para el canterano del América, misma que detalló la mencionada entrevista
"Al principio me acuerdo que me tenía que agarrar yo de la pared o ir agarrado de alguien porque como que me iba del lado. Cosas como para agarrar un vaso de agua que me estuvieran ofreciendo, yo iba normal, pero cuando ya estaba cerca de tomarlo iba con más precaución para sí agarrarlo. Al final dicen los doctores que es normal", reveló.
"Veía a los árboles moverse mientras caminaba"
Los primeros atisbos de recuperación cognitiva del delantero de la Selección Mexicana sucedieron satisfactoriamente. Pronto tuvo que probar suerte de nuevo en las canchas de entrenamiento del Wolverhampton, en donde vivió capítulos poco ortodoxos derivados del golpe que recibió en la cabeza.
"Iba a caminar las primeras veces al club después de dos semanas de estar en casa, y en las canchas está lleno de árboles. Y siento que voy caminando, volteo a ver los árboles y se están moviendo", relata Raúl.
Pronto, esas sensaciones fueron quedándose atrás y su cotidianidad como jugador profesional de futbol fue regresando, incluyendo el momento en el que tuvo que volver a entrenarse con sus compañeros en los Wolves, quienes, por diversas circunstancias, lo hicieron sentir como Lionel Messi.
"Cuando me junté al grupo me acuerdo que las primeras semanas era 'nadie puede tocar a Raúl', era sin contacto, y yo me sentía Messi quitándome a todos. Casi para acabar la temporada, me dieron permiso de contacto y fue muy padre el regresar y volver a sentir esa emoción y ese roce con mis compañeros", describió.
El momento decisivo para Jiménez: cabecear el balón
En la memoria del futbolista del Tri se quedó registrado que su vida cambió tras ir a buscar un balón por aire; no el golpe, solo la acción de hacerlo. Aún asi, cuando llegó el momento de recrear dicho gesto técnico, las dudas aparecieron.
"No me dejaban cabecear, pero llegó un momento en que me dijeron 'ya vamos a empezar a cabecear'. Primero pelotas flotaditas y llegó un momento en el que (fueron) pases largos y me acuerdo que al primero si fui como con miedito, pero después de esa que vi que no pasó nada, ya las demás,normal" compartió.
Si bien el rendmiento de Raúl Jiménez no fue el mismo que exhibía al momento del dramático encontronazo con David Luiz en un Arsenal vs Wolverhampton, su accionar en el campo no desmerece en absoluto con el resto de sus compañeros y colegas. Raúl es un ejemplo de superación y de trabajo duro. Si ya supero una fractura de cráneo, quizá habría que confiar en que una pubalgia no le quitará la posibilidad de figurar en Qatar 2022.