Los dirigidos por Guillermo Vázquez sencillamente no aparecieron en el Estadio Universitario. Pumas batalló en demasía para hilvanar pases y eso lo aprovechó la escuadra de casa que no tardó en ponerse al frente en el marcador a los 15' vía penal que cobró André Pierre Gignac.
A la media hora, Tigres duplicó la ventaja ante la algarabía en el "Volcán" por conducto de Javier Aquino. Los visitantes prácticamente desaparecieron por el resto del primer tiempo y gran parte del segundo, las cosas se ponían cuesta arriba.
Por si fuera poco, el brasileño Rafael Sobis hizo oficial la goleada a los 60' para que los de Ricardo Ferretti ya prácticamente se sintieran con el trofeo en sus vitrinas. Ni siquiera el ingreso de Ludueña y Dante López modificó el rumbo para unos Pumas que se guardaron todo para la vuelta.
Un 3-0 que parecía definitivo, y si bien Tigres se llevó la gloria, sufrió como nunca en el Pedregal, hasta la definición de penales. Dos caras distintas en esa Final, aunque la primera fue totalmente favorable para los de San Nicolás de los Garza.
