En el derbi del norte de Londres hubo idas, venidas, euforia, polémica, tensión, héroes como Lacazette y Aubameyang, antihéroes como Mike Dean, el árbitro, y, por encima de todo, la clarividencia de Unai Emery, artífice con sus decisiones de la espectacular remontada del Arsenal para vencer 4-2 ante el Tottenham.
¡El norte de Londres es rojo! En un partidazo, Arsenal vence a Tottenham
Los dirigidos por Unai Emery empezaron perdiendo, luego les dieron la voltereta, para que finalmente ganarán 4-2 en el Emirates Stadium.
Los de Mauricio Pochettino rozaron durante muchos minutos la posibilidad de romper su estadística en el Emirates Stadium, estadio en el que, desde su inauguración en 2006, solo han conseguido una victoria, pero dos goles de Pierre-Emerick Aubameyang y dos latigazos de Alexandre Lacazette y Lucas Torreira dejaron los tres puntos en casa.
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— Arsenal FC (@Arsenal) December 2, 2018
Y de haberse llevado la victoria los 'Spurs', Mike Dean, colegiado del encuentro, hubiera tenido gran parte de la culpa, ya que los dos goles del Tottenham llegaron en acciones discutibles.
Apenas a los diez minutos de juego, el claro dominió Gunner sirvió para que colocaran un centro lateral que Jan Vertonghen intentó evitar pero terminó levantando un brazo por encima de la cabeza al saltar y con él despejar el balón. Por lo que la pena máxima fue señalada.
Aubameyang asumió la responsabilidad, engañó a Lloris y convirtió su gol número nueve en la Premier League, el que le permite tomar el liderato en la tabla de goleadores.
Veinte minutos después, los visitantes marcaron el descuento a través de una jugada de Christian Eriksen, que puso una pelota tensa al primer palo en una falta lateral para que Dier, en fuera de juego por centímetros, cabeceara al primer palo y batiera a un Bernd Leno poco contundente.
Los locales había perdido los nervios y el mando del encuentro y solo cuatro minutos después el Tottenham volteó el marcador con ayuda del colegiado cuando Heung-Min Son se internó en el área y se dejó caer ante una barrida de Rob Holding, ante la que fue señalado el segundo penal del encuentro. Harry Kane, con la misma tranquilidad que demostró 'Auba' minutos antes, dictó sentencia desde el punto de penalti.
La desventaja en el marcador obligó a mover fichas a Emery, que quitó al descanso a los intrascendentes Henrikh Mkhitaryan e Iwobi, y dio entrada a Lacazette y Aaron Ramsey. El galés tardó trece minutos en asistir a Aubameyang para nivelar el partido. Héctor Bellerín rompió dos líneas con un pase en profundidad. Ramsey, en carrera, rozó lo justo el balón para dejárselo a Aubameyang en la frontal del área y el gabonés, de primeras, colocó el esférico pegado al palo con el interior.
Llegado a ese punto, Emery quería la victoria a toda costa y se deshizo de la defensa de tres metiendo al joven Matteo Guendouzi al medio. Los frutos se dieron rápido. Lacazette cazó una contra y, resbalándose, acertó con un disparo que tocó en Dier y se coló en la meta de Lloris. El uruguayo Torreira, minutos después, desató la euforia en el Emirates cuando cruzó un balón dentro del área para poner el cuarto tanto 'Gunner'.
Los de Pochettino no pudieron refrendar la victoria ante el Chelsea y caen hasta el quinto puesto de la tabla, mientras que el Arsenal, que finalizó el partido entre los 'olés' del público, escala hasta puestos Champions League y se sitúa a ocho puntos del liderato.