El Chelsea sufrió pero cumplió ante el Vidi de Hungría en Stamford Bridge. Morata fue el salvador que, sin siquiera festejar, evitó un resultado no previsto por el club londinense.
Sin mucha puntería, Chelsea derrota al Vidi por la mínima en la Europa League
El club londinense se cansó de pecar en el área rival y gracias a un gol de Álvaro Morata pudo imponerse al humilde cuadro húngaro.
Primer tiempo de no creerse para los ingleses. El equipo de Maurizio Sarri llegó cuando quiso y cómo quiso al área del Vidi sin mayor problema, pero al momento de definir pecó de más.
Fábregas, Morata, Kovačić, Emerson, Willian, Loftus-Cheek, Pedro. Todos tuvieron al menos una oportunidad para marcar, pero nadie contó con la pericia y, sobre todo, la humildad para ser pragmáticos frente al arco húngaro.
El inexperimentado cuadro de Hungría tuvo dos jugadas de peligro en los primeros 45 minutos. Se dedicó a "defender" de una forma rudimentaria: todo balón que cruzaba el área grande, por tierra o aire, era despejado a la brevedad.
Por más extraño que parezca, la torpeza mantuvo pulcro el arco del Vidi en la primera mitad. Del otro lado, la frustración fue una constante en el cuadro londinense.
Llegó el complemento y más de lo mismo, aunque esta vez el Vidi tuvo mayor presencia con el balón y puso en aprietos al Chelsea durante los primeros minutos.
Sin embargo, la suerte suele abandonar a aquellos que no hacen algo por conservarla. La anotación del equipo de Stamford Bridge era inminente y, por fin, al 69', Morata culminaba con la punta de su botín una buena jugada nacida en la banda derecha.
Centro. Desvío con la cabeza de Willian. Remate del español. El Chelsea se ponía adelante con una vida de partido por jugarse.
La narrativa del encuentro no cambió mucho después del primer y único gol. Sin embargo, el Vidi se quedó a una gran atajada de Kepa Arrizabalaga al 82' de empatar el partido. Morata tendría aún tiempo para sentenciar el partido pero erraría su disparo cruzado.
Así, el Chelsea ganó el encuentro con un marcador mediocre (1-0) ante un equipo del que todos esperaban menos.