Esta noche Diego Costa confirmó que puede volver a ser el ‘9’ soñado para la afición Colchonera. Con una actuación prodigiosa en la apertura del telón en Europa, el ariete ayudó al Atlético de Madrid a vencer al más odiado rival rojiblanco, y de paso, a pulverizar la paternidad merengue.
Diego Costa, el ‘Lagarto’ que se devoró al Madrid en la Supercopa
El ‘19’ colchonero fue el mejor jugador de la final y clave para que el Atlético por fin pudiera vencer otra vez a los blancos en Europa.
El brasileño nacionalizado español fue la gran figura de la Supercopa de Europa que el Atlético obtuvo con un categórico 4-2 sobre el Real Madrid, para consagrarse como el mejor club del Viejo Continente.
Los seguidores del ‘Atleti’, angustiados por la falta de pegada, ya pueden irse olvidando de eso. El bajo nivel de Costa en el primer semestre del año, la marcha a Japón del ‘Niño’ Torres y el pase de Gameiro al Valencia, preocupaban a la afición rojiblanca que exigía el fichaje de Edinson Cavani. El club contrató a Nikola Kalinić del AC Milan, pero hoy quedó claro que el croata no tendrá nada fácil quitarle la titularidad al decisivo dorsal ‘19’.
Costa hizo valer su apodo de ‘Lagarto’, por el nombre de su ciudad natal, pues fue un depredador adelante y desde el inicio marcó la pauta con un gol impresionante que sacudió al madridismo.
El delantero centro de la selección española fue el mejor jugador de la final europea, mostrando que puede estar en la elite de los goleadores del planeta. La ‘Pantera’ participó en los cuatros goles de su equipo con entrega, potencia, lucha, sacrificio y, sobre todo, contundencia.
Además, hoy Diego Costa grabó su nombre en la UEFA al marcar el gol más rápido en la historia de las finales europeas. Apenas a los 50 segundos anotó el 1-0 dejando ver mal a dos de los mejores centrales del mundo. Primero le ganó por arriba a Ramos, luego por velocidad, se sacó de encima a Varane y fusiló a Keylor Navas con un fierrazo brutal a primer poste. Golazo.
El ariete con doble nacionalidad fue una amenaza constante para la defensa del Real Madrid, que no supo cómo contrarrestar la fortaleza y corpulencia del poderoso delantero de los Colchoneros.
Cuando agonizaba el partido y el Madrid intentaba cuidar su ventaja de 2-1, de nuevo apareció Diego Costa en el momento justo. Empató el marcador con su olfato goleador y mandó al alargue.
Al minuto 79, Marcelo se equivocó no dejando salir un balón por la banda; Juanfran le ganó la pelota y tocó para Ángel Correa que fue hasta línea de fondo, y metió una diagonal de la muerte que se encontró con un zurdazo letal de Costa para el 2-2 que igualó todo.
En el tiempo extra el Atlético hizo valer su mejor momento y remontó al Madrid para sepultar la supremacía merengue en Europa. Corría el 97’ cuando la zaga blanca se equivocó de nuevo. Ramos tocó cortó para un Varane muy confiado, que se durmió ante la presión de Thomas, este tocó para Costa que le tiró la pared, el ghanés lanzó un centro retrasado que prendió de volea Saúl, marcando un gol impresionante, el lapidario 3-2 colchonero.
Cinco minutos después, Costa volvió a originar la jugada que terminó por sentenciar el encuentro. El portentoso delantero retuvo el balón dentro del área, jalando la marca de hasta cuatro madridistas, y tocó atrás para Vitolo que cambió de juego a la llegada de Koke quien definió raso el gol del campeonato.
De esa forma Costa se devoró al Madrid para celebrar la conquista de un nuevo título europeo.