La mexicana Paola Espinosa, doble medallista olímpica en clavados, reconoció este domingo que se prepara para los Juegos de Tokyo 2020 con poca presión porque ya no necesita demostrar nada y eso le permite disfrutar más.
Paola Espinosa sobre Tokyo 2020: "Ya no tengo que demostrar nada"
La clavadista mexicana se quitó presión y aseguró que disfrutará sus últimos Juegos Olímpicos.
"Ya no tengo que demostrar nada, he hecho una carrera bonita, tengo una trayectoria reconocida por gente de otros países y quiero hacerlo porque me gusta, con la ilusión de que mi hija me vea en el podio de los Juegos Olímpicos", aseguró en entrevista a Efe.
Espinosa, campeona mundial de la plataforma de 10 metros en 2009, ganó medalla de bronce en clavados sincronizados en Beijing 2008 y mejoró a plata en Londres 2012, lo que la sitúa como una de las mejores deportistas latinoamericanas del siglo XXI.
A los 33 años la deportista llevaba un buen ritmo de preparación para Tokyo 2020. Después de ganar medalla de bronce desde el trampolín en los Mundiales del 2019 en Gwangju, Corea, había mostrado buena forma deportiva junto a su compañera Melany Hernández, pero fue sorprendida por el aplazamiento de los Juegos.
"Fue un golpe duro. Nos iba bien a Melany y a mí, seguimos entre las mejores del mundo, ganamos el Campeonato Nacional, teníamos una buena racha y esto del cambio significa replantear mi vida y mis metas", aceptó.
Aunque le costó asumir el cambio de los Olímpicos para el 2021, Paola insiste que el propósito de trabajar para una medalla se mantiene y mientras está aislada para evitar el contagio de coronavirus, continúa los entrenamientos para no perder la forma deportiva.
"Hago rutinas en la caminadora, con mancuernas, ejercicios abdominales, isométricos y trabajo la flexibilidad. Me estiro para cuidar la salud de la espalda y así me mantengo activa hasta regresar a la alberca", apuntó.
Paola buscará su lugar olímpico en los clavados individuales, pero tiene más posibilidades de ganar medalla en los sincronizados. Según cree, en el próximo año no cambiará el programa de clavados con el que ganó medalla en los Mundiales y se concentrará en perfeccionar el acople con su compañera.
"En sincronizados visualizo una competencia fuerte, buena de mi parte con Melany. A los jueces les gusta nuestra forma de tirar y eso es difícil de lograr en un deporte de apreciación. En Tokyo quiero pelear hasta el último clavado", agregó.
Espinosa es uno de los casos de perseverancia más notables del deporte mexicano. Cuatro meses antes los Juegos de Río 2016 no podía levantarse de la cama por el dolor ocasionado por dos hernias discales y en la justa olímpica estuvo cerca de ganar medalla.
Ahora cuida la espalda, lo cual le ha permitido trabajar sin dolores.
"Hago ejercicios de fortalecimiento y estiramiento. Mi doctora me ha ayudado y llevo mucho tiempo sin dolores; mi entrenador, Ivan Bautista, y mi nutrióloga, han sido fundamentales", concluyó.
México aspira a ganar por lo menos cinco medallas en Tokyo 2020 y una de sus apuestas principales es en clavados. Además, el país tendrá buenas opciones de ser protagonista en taekwondo, tiro con arco, beisbol, tiro deportivo, gimnasia y futbol, si se clasifica en este deporte.