El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, no continuará con el 'bracket presidencial' que durante sus ocho años de gestión realizó su predecesor, Barack Obama.
Donald Trump rompe la tradición del 'bracket presidencial' para el March Madness
El presidente de los Estados Unidos declinó hacer su predicción para las finales del baloncesto de la NCAA, como lo hacía su predecesor Barack Obama
Obama, aficionado confeso al baloncesto y jugador en sus épocas de preparatoria, brindaba a la cadena ESPN sus pronósticos para el March Madness, la etapa final que define al campeón de la NCAA.
El expresidente no era quizás el más atinado en sus predicciones, aunque tuvo sus destellos. Entre 2009 y 2014 tuvo un muy respetable 74.4 por ciento de aciertos en los ganadores de la primera ronda, mientras que precisamente en 2009 dio con el campeón: la Universidad de North Carolina.
De cualquier manera, la participación de Obama era una especie de "banderazo de salida" para el March Madness e impulsó el interés de los aficionados al baloncesto universitario.
Un portavoz de la cadena ESPN declaró: "expresamos nuestro interés a la Casa Blanca por continuar el bracket presidencial. Ellos han declinado respetuosamente."
Trump es un apasionado del golf, tiene 17 campos alrededor del mundo; jugó béisbol en la Academia Militar de New York y también practicó baloncesto, fútbol, boliche y luchas; además de llevar una relación de amistad con Robert Kraft, dueño de los New England Patriots, el coach Bill Belichibk y el quarterback estelar Tom Brady.
Pero fuera de lo que practicó en los años 60, Trump tiene poca relación con el basquetbol. Se le vio en años pasados en pocos partidos de la NBA y en días pasados tuvo un intercambio de tuits poco amistosos con el dueño de los Dallas Mavericks, Mark Cuban.