Para nadie es un secreto que la ciudad más azotada por el narcotráfico durante las décadas de los 80 y 90 fue Medellín. Con un cartel que además de muertos y violencia, dejó un legado que enlutó a miles de familias.
El rugby, el deporte que se tomó Medellín
El 11 de mayo Colombia se enfrentará a Argentina por primera vez en territorio colombiano, en el que muchos dicen “el partido más importante en la historia del país”.
Sin embargo hoy, 30 años después de aquel yugo, hay un deporte que se asoma como uno de los más populares en la ‘Ciudad de la eterna primavera’: el rugby.
Hace 30 años el deporte ni siquiera había llegado de manera oficial al país, apenas se jugaba en algunas universidades, como un hobby y más como una actitud rebelde a tanto fútbol. Pasaron los años y las universidades empezaron a jugarlo de manera competitiva, pronto, varios equipos de Bogotá y Medellín empezaron una aventura que hoy los tiene ad portas de jugar el partido de rugby de más relevancia en territorio colombiano.
Hace poco más de 10 años, el censo de jugadores de rugby no superaba los 500. Hoy, según datos de la Federación Colombiana de rugby, el número ronda los 20 mil, entre hombres y mujeres de todo el país, que sueñan con vestir algún día la camiseta de los Tucanes, el equipo nacional de Colombia.
Es tal el crecimiento que ha tenido el rugby en el país cafetero, que para el partido ante Argentina XV del próximo sábado se espera un lleno total en el estadio Cincuentenario de Medellín y en donde además se tiene preparada una gran fiesta en la antesala del partido más importante en la historia del rugby colombiano.
La Federación tiene preparada un Fan Zone, donde los asistentes podrán vivir una experiencia única, con juegos didácticos, charlas, y un ambiente realmente ‘rugbístico’ que adornarán y calentarán el partido ante los argentinos, que tomarán el partido como preparación para el Mundial de Japón que comenzará en septiembre.
Según el propio presidente de Fecorugby, Andrés Roberto Gómez, el deporte de la ovalada vive su mejor momento en la historia del país, con jugadores en ligas europeas como Andrés Zafra, y varios prospectos que pueden dar el salto a un rugby profesional en otro país.
Además, gracias al buen trabajo que se hizo en los Juegos Olímpicos de Río 2016 y de la Juventud en Buenos Aires 2018, el rugby empezó a despertar pasiones en una neonata afición, que de a poco se hace sentir en las canchas colombianas.
Basta con ver una jornada de los torneos interligas de cualquier departamento del país, para darse cuenta que el rugby ya empezó a mover masas. Caravanas de carros y motos vitorean la llegada a los escenarios deportivos, colman las graderías y viven como verdaderos hinchas la pasión por un deporte que cada día se populariza más.
En cuanto a lo deportivo, se espera que Tucanes haga una buena presentación, superando lo hecho en su debut el año pasado donde terminó último. Además que tratará de dejar una buena impresión ante el mejor equipo de Sudamérica, que aunque su objetivo no es quedarse con el título, pondrá ante Colombia lo mejor que tiene.
Una verdadera fiesta del rugby se espera en Medellín, la ciudad que se transformó en la meca del rugby colombiano y que con mirar sus calles, sus edificios y sobretodo la sonrisa y calidez de su gente, cuesta pensar que fue el centro de operaciones del cártel de droga más poderoso del mundo.