El de 2020 ha sido un año tortuoso en muchos sentidos, pero en lo que a materia deportiva respecta, la pandemia de coronavirus le asestó un uppercut directo a la mandíbula a la industria del deporte y la puso contra las cuerdas, mareada y aunque tímidamente está intentando recuperarse tras el 'conteo de protección', el panorama no está claro aún incluso para las Grandes Ligas.
Arizona o Florida ¿cuál es la mejor opción para las Grandes Ligas?
MLB busca arrancar el 4 de julio su recortada temporada de 2020, pero ¿qué sede es mejor?
Una de las principales ligas mundiales afectadas en el mundo es Major League Baseball, cuya temporada 2020 debió haber arrancado el pasado 26 de marzo pero, como es sabido, la crisis sanitaria mundial impidió que este plan fuera posible, y la campaña no ha arrancado.
Ante la actual situación, el comisionado de las Grandes Ligas, Rob Manfred, baraja sus opciones y afortunadamente se abren a dos panoramas que son jugar o en Arizona o en Florida, estados de la Unión Americana en los que los gobernadores ya dieron luz verde para que los deportes profesionales regresen a esas entidades.
Opción 1: Arizona
Hace casi una semana, el gobernador del estado, Doug Doucey, dio un anuncio esperanzador y era que en el 'Estado del Gran Cañón' las puertas para el regreso del deporte profesional están abiertas. La mitad de los equipos de las Mayores juegan en ese estado durante la pretemporada en la Cactus League, es decir, existe una infraestructura suficiente como para llevar a cabo partidos.
Diamondbacks, Cubs, White Sox, Reds, Indians, Rockies, Royals, Angels, Dodgers, Brewers, Athletics, Padres, Giants, Mariners y Rangers son los equipos que tienen sus complejos en el estado de Arizona, esto quiere decir que un total de 8 equipos de la Liga Nacional y siete de la Liga Americana están ubicados en la zona de las montañas.
Una de las grandes ventajas que existe en Arizona es que las instalaciones de los clubes que forman parte de la Cactus League están bastante compactas en lo que a distancia se refiere, los traslados son muy amigables y expeditos.
Por ejemplo, los Cubs y los Athletics tienen sus complejos en Mesa, y el lugar más remoto de acuerdo a esa área, es la localidad de Surprise, donde los Royals y los Rangers tienen las suyas. La distancia que las separa es de unas 51 millas (unos 82 kilómetros), y el tiempo de traslado es de 1 hora y 4 minutos en auto.
Opción 2: Florida
Al igual que su contraparte en Arizona, el gobernador de Florida, Ron de Santis, un día después del anuncio de Doucey, manifestó que el 'Estado del Sol' le abría también las puertas al deporte profesional y se declaraban listos si es que las ligas más importantes de Estados Unidos decidían elegirlo como sede.
Una de las ventajas que lleva Florida sobre Arizona es que ya llevaron a cabo algunos eventos deportivos, a puerta cerrada, y esto les ha dado la pauta para contar con experiencia en ese sentido. Cabe recordar que uno de los más grandes acontecimientos de la industria del deporte es WrestleMania de WWE, que se llevó a cabo en su Performance Center, ubicado en Orlando.
En el norte del estado, en Jacksonville, el UFC también ha efectuado ya eventos de manera exitosa en un intento por regresar la actividad deportiva.
Al igual que en Arizona, en Florida se aglomeran 15 equipos de la Gran Carpa en lo que se llama Grapefruit League, y son: Braves, Red Sox, Orioles, Tigers, Astros, Marlins, Twins, Mets, Yankees, Phillies, Pirates, Cardinals, Rays, Blue Jays y Nationals. Son 7 equipos de la Nacional y 8 de la Americana.
Una de las desventajas podrían ser los traslados, pues, por ejemplo, desde la sede de los Blue Jays, en Dunedin, a donde se ubican los Nationals y los Astros, en West Palm Beach, hay que hacer un trayecto en auto de 3 horas y 46 minutos (229 millas, unos 368 kilómetros. Y, por ejemplo, de la sede de los Yankees, en Tampa, a las instalaciones de los Red Sox, en Fort Myers, se deben hacer 2 horas y 34 minutos, luego de recorrer 143 millas (230 kilómetros).
Lo ideal sería...
No cabe duda que tanto Arizona como Florida se erigen como grandes sedes potenciales para poner en marcha la temporada 2020 de las Grandes Ligas, ya que ambos estados tienen sus ventajas, y, como es normal, también sus desventajas. En días o semanas deben tomar una decisión consensuada.
El comisionado de las Grandes Ligas, los dueños de equipos y los peloteros sostienen charlas acaloradas en cuanto a cómo debería repartirse de manera equitativa el dinero, considerando que los partidos tendrían la peculiaridad de jugarse sin público y que sería una campaña recortada a causa de la pandemia y ninguna de las dos partes cede mucho. Ojalá este tema no sea un factor que impida la puesta en escena de la temporada.
Tentativamente, y es algo que ilusiona y llena de esperanza, el plan es que la temporada se pueda comenzar el 4 de julio, teniendo aproximadamente un mes previo para reanudar los truncos entrenamientos primaverales. Solo resta apelar a los buenos hábitos de los mejores bateadores en la caja de bateo: ser pacientes y hacerle swing a la bola buena.