Una reciente investigación del Wall Street Journal explica a fondo cómo es que funcionaba el sistema de los Houston Astros para robar señales en la MLB, apodado 'Codebreaker' o 'Dark Arts'.
'Dark Arts', el sistema de los Astros para robar señales
Una investigación del Wall Street Journal detalla cómo funcionaba el infame programa.
El periodista Jared Diamond revela en su artículo la tremenda cooperación de todos en la organización de los Astros para llevar a cabo el programa 'Codebreaker' y el cual contaba con la complicidad del entonces gerente general, Jeff Luhnow.
Diamond narra que el sistema de robo de señales fue idea de Derek Vigoa, entonces becario en el departamento de información avanzada de los Astros, quien un día se acerco a Luhnow para presentarle una aplicación basada en Excel que sería de ayuda para decodificar las señales de los catchers rivales. Así, casualmente.
A Luhnow le agradó la idea y puso a todo el staff a trabajar en cojunto: mientras unos veían los juegos en vivo, otros se dedicaban a introducir en el documento el tipo de señales de cada catcher. Del resto se encargaba el algoritmo que buscaba similitudes entre señales ejecutadas y lanzamientos realizados. Bingo, así es como lograban anticiparse a las jugadas.
El método fue tan eficaz que comenzaron a usarlo en juegos de visita.
Cuando la investigación de la MLB salió a la luz, Luhnow se cansó de jurar que nunca estuvo al tanto de lo que sucedía con el oscuro programa, pero una serie de correos electrónicos recolectados en la investigación lo echaron de cabeza, ya que en varias ocasiones respondió al director del datos avanzados, Tom Koch-Weser, "tu reportes sobre el programa son muy útiles".
Tras el escándalo, el propietario de los Astros, Jim Crane, despidió a Luhnow y al manager AJ Hinch. Pero los cerebritos del programa, Koch-Wester y Vigoa --quien hasta ascendió de puesto a senior manager de operaciones-- siguen formando parte de la organización.