Aunque el nombre de Enoli Paredes suena cada vez más fuerte en los montículos de Grandes Ligas por su labor como pitcher en los Houston Astros, el verdadero sueño del serpentinero dominicano no se ubicaba en los diamantes de la MLB, sino en las pistas de baile.
Enoli Paredes, el pitcher de los Astros que quería ser bailarín
El lanzador dominicano de 25 años tenía la ilusión de brillar en la pista de baile, pero la vida le tenía reservado un lugar en los Houston Astros de la MLB.
"Me hubiera gustado ser bailarín... Salsa, bachata, merengue, todo. Siempre estoy bailando, siempre tengo mi música en el carro, cuando llego al estadio, siempre tratando de conseguir un espacio para poder mantenerme en forma”, comenta Paredes en entrevista con Daniel Schwartzman de TUDN.
Sin embargo, la via dio muchas vueltas y los Astros descubrieron a tiempo la proyección y el talento que exhibía Paredes desde el montículo, y a partir de ahí, no le quitaron la vista de encima.
"Estoy muy agradecido de poder ayudar al equipo en Grandes Ligas, ya que fue el equipo que confió en mí y que me dio la oportunidad en 2014 y con el equipo que pude hacer mi debut que es el sueño de todo pelotero".
No obstante, para llegar hasta estos niveles el relevista diestro tuvo que sortear una serie de adversidades: desde la competencia en ligas menores, hasta las lesiones y el idioma.
"Una de esas barreras fue el inglés, cuando llegué aquí no hablaba nada, entonces vi que era necesario. El 90% de los coaches son americanos y no hablan español, entonces la mayoría de la información venía en inglés y yo no me estanco, no me pongo límites”.
Durante esta pandemia, Enoli se enfocó en perfeccionar su curva para ampliar su repertorio de cara a una temporada que espera sea de consolidación y, ¿por qué no?, de cábala.
"Si la temporada pasada use el 60, ahora voy a usar el 48. Así lo decidí porque fue mi primera chaqueta que usé con mi apellido cuando llegué a Estados Unidos y la felicidad que sentí al ver mi apellido en una chaqueta profesional fue un momento demasiado bonito".
A pesar de que el nombre de Enoli no tiene ningún significado en particular, él quisqueyano espera seguir generando eco en la MLB para darse a conocer y comenzar a labrar un legado como el que construyó su ídolo de la infancia: Pedro Martínez.