Iván Rodríguez fijó la mirada a donde estaban sus padres, José y Eva, secándose las lágrimas en su exaltación al Salón de la Fama del béisbol.
Iván Rodríguez se roba el show en la ceremonia de ingreso al Salón de la Fama del béisbol
El puertorriqueño se convirtió en un pelotero inmortal y dedicó el logro a sus padres, presentes durante su inducción a Cooperstown.
“A mi padre, José, mi primer profesor de béisbol, mi mejor amigo... Tú fuiste el que me aconsejaste para cambiar de ser lanzador a ser receptor. Si estoy aquí, mirándote a los ojos como un salón de la fama, tú eres salón de la fama", dijo el astro puertorriqueño.
Dirigiéndose a su madre, Rodríguez añadió: “Mami, misión cumplida, lo logramos. Lo hiciste, tienes un hijo de 45 años aquí en Cooperstown, recibiendo una placa como uno de los mejores jugadores del béisbol.... “Si mi papá es ‘ hall of famer’, tú eres ‘ hall of famer’ doble”.
Esas conmovedoras palabras sobresalieron en el discurso pronunciado por Rodríguez el domingo al quedar entronizado como nuevo miembro en el templo de los inmortales del deporte.
Durante la ceremonia, en un día de clima perfecto ante 27 mil fanáticos, ingresaron también al Salón de la Fama como nuevos miembros los expeloteros Tim Raines y Jeff Bagwell, así como el excomisionado Bud Selig y el ejecutivo retirado John Schuerholtz.
“Es un honor increíble para mí”, dijo Rodríguez, aclamado por cientos de espectadores, muchos vestidos con jerseys de Puerto Rico.
Durante un discurso en el que intercaló comentarios en español e inglés, Rodríguez resaltó sus raíces al convertirse en el cuarto boricua en el recinto de los inmortales, al unirse a Roberto Clemente, Orlando Cepeda y Roberto Alomar.
"Aprovecho este momento en que estoy aquí viendo todas esas banderas de Puerto Rico muy lindas, quiero que las levanten muy alto ahora mismo porque me siento bien orgulloso de ser puertorriqueño y de ser el cuarto ‘ hall of famer’ que sale de la isla tan linda de Puerto Rico", dijo Rodríguez en español.
El cátcher de Manatí ostenta los récords de más juegos de las mayores en su posición (2 mil 427) y más outs por parte de un receptor (12 mil 376). Bateó 311 jonrones y ostentó un promedio de .296 en su carrera.
Asimismo, es apenas el segundo cátcher consagrado en Cooperstown en la primera ocasión en que su nombre apareció en las papeletas de la Asociación de Cronistas de Béisbol de Norteamérica (BBWAA). Obtuvo el 76 por ciento de los votos.
Así, se unió el ídolo de su niñez, Johnny Bench, el exastro de los Rojos de Cincinnati.
No dejó de instar a que los jóvenes persigan sus ambiciones: “Un chico bajito de Puerto Rico, con un gran sueño. Nunca permitan que les quiten sus sueños”.
En 21 temporadas, principalmente con los Rangers de Texas, Rodríguez fue elegido 14 veces al juego de Estrellas. Ganó 13 veces el Guante de Oro, otro récord, y se apoderó en siete ocasiones del Bate de Plata.